Los precios del petróleo terminaron el año con un salto a su nivel más alto en más de dos años este viernes en Nueva York, en medio del optimismo sobre la evolución de la demanda mundial.

En el New York Mercantile Exchange (Nymex), el barril de West Texas Intermediate (designación del “light sweet crude” negociado en EEUU) para entrega en febrero terminó en 91,38 dólares, en alza de 1,54 dólares en relación al jueves.

En baja en la apertura, se recuperó netamente hacia el final de la sesión, alcanzando en los últimos minutos de operaciones 92,06 dólares, techo que no registraba desde octubre de 2008. En 2010 registró un alza de 15%.

“No pasa gran cosa”, constató Andy Lipow, de Lipow Oil Associates. “Probablemente se trate de una reacción tardía al descenso de los stocks” en Estados Unidos la semana pasada.

Publicados el jueves, los datos de reservas semanales de petróleo en Estados Unidos mostraron un descenso de los stocks de crudo menos marcado que lo esperado por los analistas.

Los precios habían bajado netamente el jueves “que no era lo que podía esperarse con un descenso de stocks y una buena demanda”, consideró Lipow. “El mercado dispuso de una jornada para asimilar esos datos y se siente confiado sobre la demanda. Pienso que tendremos un barril a 100 dólares en 2011″.

El barril de WTI, que evolucionó durante gran parte del año entre 70 y 80 dólares, salió de esa banda en el otoño boreal, impulsado por el debilitamiento del dólar, buenas perspectivas de consumo y una ola de frío en Estados Unidos y Europa.