Un joven de 25 años permanece en estado grave en el Hospital Regional de Concepción, luego de recibir un disparo en el abdomen en las afueras de su domicilio. El caso reveló un drama familiar, vinculado con drogas y personas atemorizadas por la delincuencia.

Imagen Pedro Cid

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Para Nelson Lagos, propietario de un taller de cerrajería para automóviles en calle Prieto -entre las calles penquistas Caupolicán y Rengo-, el estado grave en que se encuentra su hijo Eduardo, de 25 años, es una situación que se veía venir, producto de una compleja situación familiar.

Ocurre que su hija convive en la misma cuadra con un sujeto de aproximadamente 50 años, a quien identifica como Tito Nicolla, un delincuente avezado, acusa, y que fue éste y el hijo de la pareja, es decir, su nieto, quienes maltraron a su hijo.

Le dispararon en varias ocasiones y uno de los proyectiles dio en el abdomen. Herido en las afueras del portón de su domicilio, la víctima también fue brutalmente golpeada, según comentó el compungido padre.

El joven fue intervenido en el hospital penquista y tiene comprometido el bazo.

En el lugar, frente al domicilio desde donde salió el supuesto autor de los disparos, La Radio encontró una bala sin percutar. El padre del herido, un tapizador de muebles, espera ver al agresor en la cárcel.

La brigada de homicidios de Concepción tomó el caso y se encuentra en plenas diligencias para esclarecer el caso, sin que por ahora haya detenidos.