El gobierno ruso anunció el martes la aprobación de la construcción de un tramo de autopista en un bosque cerca de Moscú, un polémico proyecto que el presidente Dimitri Medvedev había puesto en espera por las numerosas críticas que había suscitado.

“Tomamos la decisión de construir la autopista (entre Moscú y San Petersburgo vía el bosque de Jimki)”, declaró el vice primer ministro, Serguei Ivanov, citado por la agencia Interfax.

“La decisión sobre el inicio de la construcción de la carretera será tomada en cuanto sea validada por el presidente”, agregó.

Medvedev había suspendido el proyecto por una movilización sin precedentes de la sociedad civil y de opositores al poder ruso. Ordenó entonces que una comisión gubernamental determinara si el trazado de esta vía tenía que ser estudiado de nuevo.

Varios detractores de la autopista y periodistas que cubrían la polémica fueron víctimas de agresiones en estos últimos dos años.