En una entrevista a revista Paula, la actual vicepresidenta de la Junji, Ximena Ossandón, hizo una firme defensa del sacerdote Fernando Karadima, acusado de al menos 4 casos de abuso sexual contra menores.
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“¿Qué le interesa al demonio: hacer caer a una persona común o al padre Karadima, que es uno de los próceres de la Iglesia Católica chilena? Es obvio: al padre Karadima, porque el daño que va a hacer es potentísimo”, afirmó recordando que fue el religioso quien ofició su matrimonio.
Consultada por la publicación respecto de si su referencia al “demonio” es metafórica, Ossandón aseveró que se trata de una presencia concreta.
“Creo totalmente en el demonio. Es cosa de verlo. Las guerras y el aborto, ¿qué son? La maldad personificada. Y, ojo, porque lo más grande que ha hecho el demonio es hacer creer a la sociedad que no existe. Así trabaja tranquilito y nadie sabe que está detrás de la puerta. Cuando mueran, muchos se van a llevar una sorpresa gigante al otro lado”.
Respecto de las críticas que le acarrearon la instalación de una efigie de la Virgen María en las oficinas centrales de la institución que dirige en julio, señaló que se trató de una excusa para criticarla.
“Que lo de la Virgen haya salido en el diario y hubiera personas a quienes les produjera arcadas, me hace sentir gran pena por ellas. Si fuera por eso, en Chile deberíamos sacar a Dios del himno nacional, tendríamos que bajar a la Virgen del San Cristóbal [...] Aquí ha habido una persecución de otro tipo. La Virgen fue el caballito de lucha, pero íbamos a ser atacados sí o sí”, concluyó.
Pese a ello, revista Paula hizo notar que Ossandón dio la entrevista acompañada de 2 periodistas de la Junji, quienes grababan sus dichos. Negó que tuvieran como fin “moderar” sus dichos debido a las críticas que estos han acarreado anteriormente.
“Están acá para perfeccionarme. Me corrigen el enfoque, la forma, y después yo converso y veo si los escucho o no”, sentenció.
