El presidente Sebastián Piñera firmó durante esta jornada el proyecto de ley para reformar la educación chilena, en una ceremonia realizada en el Patio de Las Camelias de La Moneda.

Piñera

Fotopresidencia.cl

La iniciativa ya había sido anunciada el viernes por el Mandatario, y detallada ayer en una cadena nacional voluntaria.

En la actividad realizada hoy en el Palacio de Gobierno, Piñera dijo que el proyecto ingresaba con suma urgencia al Congreso, y que se espera que ya esté aprobada antes que se inicie el año escolar 2011, “porque nuestros niños no pueden seguir esperando”, indicó.

El Presidente valoró la reforma realizada en los años 60, desarrollada en el gobierno de Eduardo Frei Montalva y que luchó contra el analfabetismo y aumentó los años de escolaridad obligatorias; también la obra realizada durante los gobiernos de la Concertación, donde se estableció la jornada escolar completa y se estableció la subvención escolar preferencial.

Sin embargo, siguió el jefe de Estado, la calidad de la educación quedó atrás, por lo que a eso es lo que apunta esta reforma, que en sus palabras es “el más grande desafío que enfrenta nuestra sociedad” y el Gobierno.

Piñera resumió en 5 las metas que se quiere lograr con esta “revolución” a la educación, como él mismo la llamó:

- Lograr que el puntaje promedio del Simce de cuarto básico aumente en 10 puntos.

- Disminuir en 10 puntos la brecha de calidad entre el 10% de estudiantes pertenecientes a familias de altos ingresos y el 10% de estudiantes pertenecientes a familias de bajos ingresos.

- Duplicar el número de estudiantes que ingresen a alguna carrera de Pedagogía con más de 600 puntos en la PSU.

- Construir no 50, sino 60 liceos de excelencia para cubrir todas las ciudades más grandes del país.

- Reformar la educación preescolar y la educación superior.

El jefe de Gobierno declaró que esta misión deberá enfrentar muchos obstáculos, y que está seguro que contará con el apoyo de los profesores, de los parlamentarios y de la sociedad en su conjunto.

Consciente de las críticas que tendrá la reforma, Piñera declaró que ésta se puede mejorar, esperando el aporte de expertos en educación, del Colegio de Profesores y de los congresistas.

Ayer, en la cadena nacional, el Mandatario adelantó que la reforma tendría los siguientes puntos, según publicó el sitio web oficial del Gobierno:

Atraer a los mejores estudiantes a las Facultades de Pedagogía, para tener así a los mejores profesores educando a todos nuestros hijos.

Todo alumno que ingrese a estudiar pedagogía con más de 600 puntos en la PSU, tendrá una beca que cubrirá el 100% de su matrícula. Si supera los 700 puntos recibirá, además, 80 mil pesos mensuales. Y si supera los 720 puntos, podrá estudiar un semestre becado en el extranjero.

Los estudiantes de pedagogía deberán rendir una prueba de excelencia al egresar, y quienes obtengan buenos resultados comenzarán sus carreras como profesores con sueldos hasta un 30% superior.

Los actuales profesores también serán evaluados, y si rinden satisfactoriamente esta prueba, mejorarán también, y sustancialmente, sus remuneraciones.

Los profesores en edad de jubilarse, accederán a un plan especial voluntario de retiro, que les permitirá recibir hasta $20 millones al momento de su jubilación. Y los profesores que ya jubilaron, y con bajas pensiones, recibirán un bono de reconocimiento de hasta 2 millones de pesos.

Se modernizará el Estatuto Docente, para tener mejores profesores para nuestros hijos y nietos, pero también, y como nunca antes, se mejorarán sus condiciones económicas, laborales y también su prestigio y dignidad.

Los directores serán los verdaderos líderes de sus escuelas y colegios. Y por eso se buscará a los mejores de los mejores. Serán elegidos mediante un concurso público, en función de su mérito, vocación y experiencia. Celebrarán convenios de desempeño, con metas públicas, claras y precisas, y responderán anualmente ante la comunidad por sus resultados.

Los directores también recibirán incentivos económicos en función de su desempeño, que llegarán hasta los 850 mil pesos mensuales. Y tendrán también mayor autonomía y atribuciones para ejercer bien su liderazgo. Podrán elegir a su equipo directivo y remover cada año hasta un 5% de los profesores que tengan mal rendimiento.

Los padres deberán participar y comprometerse mucho más con la educación de sus hijos. Recibirán periódicamente, y en sus propios hogares, información clara y precisa de los resultados del aprendizaje de sus hijos y de los establecimientos de su comuna. Y así podrán tomar decisiones más libres, más informadas.

Habrán pruebas SIMCE de lenguaje y matemáticas más frecuentes y se agregarán otras pruebas, de inglés, tecnologías de la información y educación física.

Se mejorarán los contenidos curriculares, con más horas de lenguaje y matemáticas, incorporando métodos de enseñanza mucho más eficaces e interactivos y aplicando las tecnologías más modernas del mundo, como los Notebooks y las pizarras inteligentes.

Los alumnos, padres, profesores y directores podrán apoyarse y beneficiarse con el liceo virtual de excelencia, que se está construyendo y estará disponible en Internet.