Un empresario de la Región Metropolitana, cansado de las agresiones de los pobladores, incluidos comuneros mapuche, decidió abandonar un millonario proyecto de una central energética en la comuna de Loncoche, dejando cesante a 40 personas en una de las zonas más pobres de La Araucanía.

En su fase final estaba la construcción de la central de pasada hidroélectrica en el río Cruces, donde el empresario Bautista Bosch pretendía vender energía al Sistema Interconectado Central, pero siempre tuvo múltiples problemas con los pobladores cercanos a su proyecto, donde se incluían comuneros mapuche, quienes le pedían elevadas sumas de dinero por el derecho de uso de aguas de un estero cercano, llegando estos conflictos a agresiones contra su persona y sus trabajadores.

Bautista Bosh aseguró a La Radio que, finalmente, cansado de todas las agresiones sufridas y la nula respuesta de la Fiscalía a sus denuncias, determinó abandonar su proyecto, dejando de paso cesantes a 40 personas.

Cabe destacar que el empresario de Santiago tiene a la venta una costosa turbina que adquirió para la central de pasada, además de tener otro proyecto similar funcionando y sin ningún tipo de inconvenientes en la cordillerana comuna de Melipeuco.