Una veintena de comuneros mapuche se acercaron a la sede de la Cepal, ubicada en la comuna de Vitacura, para dar su apoyo a quienes permanecen en toma al interior de este edificio, en solidaridad con los huelguistas indígenas.

Mediante un Llellipún, una ceremonia en la que le pidieron a su Dios proteger a los huelguistas mapuche en el sur, y a sus pares que mantienen tomada las dependencias de la CEPAL en Santiago, un grupo de personeros de la capital, dieron su apoyo a la causa.

El ritual consistió en una seria de ruegos, cantos, y bailes los cuales duraron por cerca de media hora.

Los comuneros que tienen ocupada la oficina de la ONU, se acercaron a recibir el apoyo, y separados por la reja de acceso, conversaron con sus pares, respecto a la situación en la que se encuentran los que están en el interior.

Richard Curinao, quien actuó como vocero de este grupo de mapuches, contó detalles de lo que hablaron.

Así también Curinao reiteró la petición al Gobierno a darle luego solución a este “calvario”, según expresó, que mantiene mal a sus “hermanos” de etnia.

Por su parte, Carabineros, que está custodiando el lugar, no ha tenido inconvenientes con estos con estas personas que se han acercado hasta el edificio en Vitacura y todo se ha desarrollado con normalidad.

Así lo explicó la capitán Sonia Flores, subcomisario administrativo de la 37 comisaría de Vitacura.

Luego del ritual los comuneros mapuche se alejaron voluntariamente de las cercanías de la CEPAL, para mantenerse en una plaza de los alrededores, donde se ubicarán durante las próximas horas.