Con una marcha por las calles céntricas de Valparaíso, lo que se suma a la olla común que realizaron ayer a las afueras de la sede sindical, los trabajadores portuarios continuaron con las manifestaciones en demanda de los bonos de mitigación y capacitación que las autoridades habrían ofrecido.

De acuerdo a Sergio Baeza, Presidente de la Confederación de Trabajadores Portuarios de Chile, tanto el seremi como la Subsecretaria de Transportes les han mentido y que tras los compromisos adquiridos no han obtenido respuesta.

Para entender el conflicto, hay que consignar primero que los trabajadores portuarios, no desarrollan directamente labores para el recinto portuario, sino para las empresas navieras que mantienen una cantidad mínima de operarios contratados y el resto de las labores son asumidas por los denominados trabajadores eventuales. Estos eventuales, son llamados sólo cuando hay trabajo, es decir cuando llegan los embarques y se les cancela por turno trabajado. En el fondo manteniendo las proporciones, están en una situación similar a los trabajadores de la temporada agrícola.

En las negociaciones los dirigentes indican que lograron obtener una mitigación para paliar en parte los meses donde no hay embarques para estos trabajadores eventuales, a través de capacitación y un bono en dinero, esto es lo que dicen no se ha cumplido, por lo que anunciaron movilizaciones más radicales.

La seremi del Trabajo, Lavinia Ceballos, indicó a La Radio que en las reuniones que se han sostenido con los trabajadores, se acordó entregar la capacitación solicitada por un monto cercano a los 580 millones de pesos, pero estos cupos no han sido utilizados por los trabajadores.

Cabe señalar que para trabajar en el puerto se necesita una autorización de la Gobernación Marítima y según los datos que maneja el sindicato de trabajadores portuarios, existen aproximadamente 8 mil personas inscritas como trabajadores eventuales, pero sólo cerca de mil 400 cumplirían funciones en forma constante o habitual.

Los portuarios anunciaron que las manifestaciones seguirán en aumento en la medida que las autoridades no les den una respuesta favorable.