La colisión ferroviaria que se produjo este lunes en el este de India, dejando 61 muertos según el último balance, se debió a una “negligencia” y no a un sabotaje, afirmó a la AFP el ministro de Protección Civil de Bengala occidental.

“No se trata de un acto de sabotaje. Es un trágico accidente que se produjo a causa de una negligencia por parte de la administración de los ferrocarriles”, declaró el ministro Srikumar Mukherjee.

Según este ministro, 61 personas murieron y más de 165 pasajeros sufrieron heridas, 89 de los cuales graves.

El anterior balance era de 57 muertos y 120 heridos.

Esta colisión se produjo dos meses después de un choque en el mismo Estado atribuido a un sabotaje de los insurgentes maoístas, que dejó 150 muertos. Un tren que hacía el enlace Calcuta-Bombay descarriló, incrustándose en un tren de carga que llegaba por la vía que estaba al lado.

Los ferrocarriles indios, administrados por el Estado, transportan diariamente 18,5 millones de personas y siguen siendo el principal medio de transporte para las distancias largas en este inmenso país, a pesar de la competencia creciente de nuevas compañías aéreas privadas.

Cada año se producen unos 300 accidentes ferroviarios en India.