El presidente de Haití, René Preval, salvó su vida en el sismo del 12 de enero gracias a que se quedó a jugar con su nieta en un jardín para luego ver cómo su casa y el palacio presidencial se desplomaban, narró el mandatario el lunes en una entrevista realizada en Cancún (este de México), en la cumbre del Grupo de Río.
René Preval | Wikipedia
En entrevista con la emisora mexicana Televisa, Preval narró que el 12 de enero, luego de asistir a una ceremonia oficial en el palacio presidencial de Puerto Príncipe, se dirigió a su casa, a donde llegó instantes antes de que empezara el sismo.
“Dejé el palacio (…), yo iba a entrar en casa. No entré en la casa porque tengo una nieta y me quede un ratito en el jardín para jugar con ella. El palacio se cayó delante mío, la casa se cayó delante de mí”, dijo Preval en la entrevista realizada en el puerto mexicano de Cancún.
Según el último balance de las autoridades, el terremoto dejó más de 217.000 muertos, pero el presidente Preval dijo a la televisora mexicana que se teme que las víctimas puedan llegar a 300.000.
La ayuda a la reconstrucción de Haití ha sido uno de los temas centrales de la cumbre del Grupo de Río que se celebra en Cancún y que reúne a dirigentes de 32 naciones de América Latina y el Caribe.
