La selección nacional saldó con un estrecho triunfo su primer partido del año, al derrotar por 2-1 a Panamá en cotejo disputado esta noche en Coquimbo.
La escuadra de Marcelo Bielsa mostró una brillante asimilación de movimientos, sacando provecho al extenso trabajo de pretemporada realizado en Juan Pinto Durán, en epecial por la banda izquierda, con los movimientos de Emilio Hernández y Rodrígo Millar, quienes complicaron enormemente a la defensiva visitante al generar múltiples opciones de gol, que fueron desperdiciadas por Edson Puch, Esteban Paredes, Daud Gazale y los antes mencionados, los que postergaban la apertura de la cuenta en el Bicentenario Francisco Sánchez Rumoroso. Mientras, Cristopher Toselli respondía, pese a los siete meses de inactividad, de brillante manera al contener en dos oportunidades los embates del seleccionado centroamericano.
Esteban Paredes se encargó de marcar la apertura de la cuenta, tras una serie de rebotes en el área panameña, rematando a ocho metros del pórtico visitante (52´), levantando a los 18 mil espectadores que presenciaron el encuentro en la Cuarta Región, los mismos que no se alcanzaron a acomodar cuando el propio Paredes con golpe de cabeza, tras el centro de Emilio Hernández desde la izquierda, cerró las cifras del cotejo (53´).
El resto del partido fue de control del balón para Chile, ayudado por la expulsión del volante Alejandro Vélez, luego de una fuerte entrada sobre Esteban Paredes (64´), lo que facilitó el trámite del juego para el seleccionado nacional, aunque una desinteligencia de Hans Martínez le permitió a Roberto Brown descontar a tres minutos del cierre del encuentro.
Ganó Chile (completó cinco victorias en línea, algo que no se veía desde la década de los 50) y el saldo es favorable, pero queda la sensación que hay mucho por mejorar, en especial a la hora de convertir en el arco de enfrente, porque lo visto en el primer tiempo, si se replica en el Mundial, puede ser fatal al final de los noventa minutos.