La Corporación Nacional Forestal en la Región de Los Ríos calificó como un arma de doble filo las lluvias caídas en la zona, para prevenir incendios forestales. El aumento de pastizales y material combustible, cuando sequen completamente, serán un riesgo inminente de siniestros de altas magnitudes, indicó el organismo.
Las precipitaciones ocasionadas por la corriente del Niño han provocado que los incendios forestales en la zona hayan bajado de 49 a 13 eventos, en relación al año pasado. Claudia Lopetegui, directora Regional de Conaf dijo que a Radio Bío-Bío que las lluvias en verano son un arma de doble filo.
El organismo está preocupado, indicó Lopetegui. Aseguró que en estas condiciones, el riesgo de incendios forestales de grandes magnitudes es inminente.
La autoridad forestal en la zona señaló, en todo caso, que prefieren gastar recursos en la prevención que en el combate de incendios forestales, que si se llegan a dar, éstos serían de proporciones, indicó la representante de Conaf.