El Grupo de Defensa del Patrimonio que se formó en Tomé para evitar que la remodelación de la Plaza de Armas cambiará totalmente su actual diseño, finalmente logró que el Concejo Municipal, encabezado por el alcalde Eduardo Aguilera, los escuchara.

Fernando Espinoza, el presidente del grupo, dijo que finalmente hubo acuerdo con la municipalidad y se mantendrá la actual distribución, con los árboles y áreas verdes que iban a desaparecer del principal punto de reunión de la ciudad.

Todo se aclaró tras audiencias públicas dónde las observaciones de buena parte de la comunidad tomecina fueron atendidas, dijo Espinoza.

Quedó pendiente la ubicación de baños públicos que quedarán fuera de la plaza, pero a escasa distancia, se dijo.