Como un “triunfo” calificó el gobierno de Argentina la resolución de la Comisión del Límite Exterior de la Plataforma Continental de la ONU, que dio el visto bueno al nuevo límite exterior de la plataforma continental perteneciente a la nación trasandina, añadiendo 1.700.000 metros cuadrados a su superficie.

La plataforma continental, según establece la Convención sobre el Derecho del Mar de 1982, abarca “el lecho y el subsuelo de las áreas submarinas que se extienden más allá de su mar territorial -a partir de las 12 millas marinas desde la línea de base- y a todo lo largo de la prolongación natural de su territorio hasta el borde exterior del margen continental”.

Esta nueva demarcación, solicitada por la administración de Cristina Fernández en 2009, consolida el trabajo que realizó por 20 años la Comisión Nacional del Límite Exterior de la Plataforma Continental (COPLA) en Argentina, comprendiendo labores de carácter científico, técnico y jurídico.

Malvinas/Falkland: ¿Incluidas o no?

Yendo más allá del papel, este visto bueno fue considerado como una victoria para las reivindicaciones de los argentinos, sobre todo en lo que respecta al conflicto con Reino Unido por la controvertida soberanía de las Islas Malvinas.

Esto porque, según aseguraron en Argentina, la nueva delimitación que aumenta en un 35% su superficie de plataforma continental considera las Islas del Atlántico Sur, incluyendo las Malvinas o Falkland.

“Esta ampliación de los límites de la plataforma de nuestro país nos permitirá defender la riqueza de nuestro mar, propiedad de todos y cada uno de los argentinos”, afirmó el presidente Mauricio Macri en Facebook.

Sin embargo, desde Reino Unido descartaron que el informe de la comisión de la ONU sea vinculante desde el punto de vista legal. Es decir, que solo representaría una opinión

El anuncio realizado por Argentina, según el Gobierno de las Islas Falkland que funciona en representación de la reina Isabel II, es “completamente engañoso” y ni la soberanía de las islas ni sus aguas territoriales se han visto afectadas por la resolución.

ONU: Si está en disputa no se toca

La Convención del Mar señala que, una vez que el Estado adopte las recomendaciones realizadas por la comisión, los límites de la plataforma que se determinen “serán definitivos y obligatorios“.

Pero la abogada y docente de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, Paula Cortés, dijo a BioBioChile que si bien la plataforma continental de las Malvinas/Falkland estaba en la petición inicial, ésta no fue considerada por la comisión.

“Con anterioridad, la Comisión ya había decidido que no estaba en condiciones de examinar y calificar las partes de la presentación que eran objeto de disputa“, señala el comunicado publicado en el portal de Naciones Unidas.

Sobre la postura del vecino país, Paula Cortés indicó que intentarán mostrar “que es un gran triunfo para ellos que se reconozca internacionalmente la disputa, pero [la comisión de la ONU] es un organismo consultivo y que no tiene carácter vinculante. Podríamos decir que es un gran triunfo diplomático“.

Oro negro bajo el mar

Las exploraciones para encontrar petróleo alrededor de las Malvinas también han sido objeto de disputa entre las administraciones de Argentina y Reino Unido, y el voto favorable de la comisión de la ONU ha sazonado esta polémica.

En mayo de 2015, tres compañías británicas aseguraron haber realizado importantes hallazgos, mientras el gobierno trasandino ha intentado bloquear todo tipo de actividad exploratoria en esas zonas.

Si efectivamente se estableciera que la plataforma continental alrededor de las islas fuese de Argentina, “Reino Unido no podría autorizar concesiones a las empresas británicas que ya están instaladas“, indica Paula Cortés, aunque reafirma que éste no es el caso.

Diálogo: la única solución

Si los dos países quisieran resolver de una vez por todas la polémica, la única alternativa que les queda es establecer un acuerdo conjunto, con el consentimiento de los dos.

“Podrían ser muchos mecanismos: negociaciones directas, una conciliación, una mediación, un tribunal arbitral. Son muchas las alternativas que ofrece el derecho internacional”, agrega la abogada.

Sin embargo, descarta que tanto Argentina como Reino Unido quieran llegar a instancias como la Corte Internacional de Justicia, ya que una vez que se zanje el asunto, uno de los dos puede perder la materia de su reivindicación en el caso de sufrir un fallo adverso.

¿Qué pasa con la Antártida?

La nueva delimitación argentina se superpone con la reclamación chilena sobre la plataforma continental antártica. Pero el canciller Heraldo Muñoz dijo que esto no tiene mayor efecto sobre nuestro país.

“Todo lo que se refiere a la plataforma continental de la Antártica está congelado bajo el Tratado Antártico, que se va a reunir en Chile en mayo. Por lo tanto no tiene ninguna importancia”, aseguró al llegar a Washington para participar junto a la presidenta Michelle Bachelet de la Cumbre de Seguridad Nuclear.

Precisamente el Tratado Antártico, firmado en 1959 por 12 países entre los que se encuentra Chile, congela las reclamaciones de soberanía.

“La Antártica es un territorio al que se le puso un montón de restricciones. No se pueden hacer perforaciones petroleras, es un territorio pacífico y conviven los países ahí sin ningún problema. Además, ha sido una zona de colaboración científica”, describe Paulina Cortés.

Para poder revisar estas pretensiones se requiere la unanimidad de los miembros consultivos, algo que hasta el momento no se ha abordado. “Tenemos una pretensión superpuesta con Argentina. Pero como este Tratado Antártico congeló las pretensiones para que se revisara en varios años, pero nadie ha querido tener la voluntad para volver a revisarlos”, agrega la abogada.