John Cisna, un profesor de ciencias del distrito escolar de Colo-Nesco en Colo (Iowa, Estados Unidos), decidió realizar un curioso experimento inspirándose en el documental “Supersize Me” (2004).

Recordemos que en la producción que casi cumple 10 años, el cineasta independiente estadounidense Morgan Spurlock se alimentaba exclusivamente de productos de McDonald’s durante 30 días. A lo largo del reportaje muestra cómo su peso aumenta y su salud tanto física como psicológica se va deteriorando.

De hecho, al final del proceso Spurlock subió 11.1 kilos, aumentó su índice de masa corporal de un nivel normal (23) a sobrepeso (26), sufrió daños graves en su hígado, además de sufrir cambios de humor y disfunción sexual. Perder los kilos ganados le tomó 5 meses.

Basándose en este famoso estudio, Cisna se propuso hacer uno propio de 90 días. Eso sí, en su caso limitó la ingesta de calorías a 2.000 diarias, y de consumir las porciones diarias necesarias de vitaminas, proteínas y carbohidratos.

Además, caminó en promedio 45 minutos diarios durante todo el experimento.

Al concluir la prueba, Cisna había perdido 16 kilos y bajó su colesterol de 249 a 170. Él asegura que comió de todo, desde ensaladas y postres de fruta hasta helados y hamburguesas.

El académico aseguró que no tiene lazos ni ningún convenio con McDonald’s y que con esto no buscaba “recomendar que la gente coma exclusivamente este tipo de comida, sino que son sus propias decisiones las que pueden marcar la diferencia”.

En este sentido, dijo que para reducir los niveles de obesidad no hay que “prohibir el consumo de ciertos alimentos, sino enseñarle a las personas determinadas pautas a la hora de comer, y fomentar la práctica de ejercicio físico”.

Al conocer el experimento, desde McDonald’s, por supuesto, lo aplaudieron. “Felicitamos a John Cisna por su pérdida de peso y mejora de la salud global, y estamos encantados de que él fuese capaz de lograr sus objetivos al tomar decisiones equilibradas, que incluían a muchos de sus artículos preferidos del menú de McDonald”, dijo Cindy Goody, directora de nutrición de la cadena de comida rápida estadounidense, en declaraciones recogidas por USA Today.

Jo Ann Hattner, consultor nutricional de la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford, dijo que la firma ha mejorado mucho su menú. “Hay que darles algo de crédito”, expresó, aclarando que no aconseja una dieta basada en McDonald’s.