A menos de un mes del cierre del período de postulaciones para el Servicio Militar, se registra la menor cantidad de voluntarios desde el 2007, cuando el acceso al sistema fue reformado para privilegiar el ingreso voluntario.

Los voluntarios inscritos hasta el 15 de febrero corresponden a un 21% menos que la cantidad de postulantes el 2012, año en que se ofrecieron 17.850 jóvenes.

Según las cifras oficiales, 14.106 postulantes se registran hasta la fecha mencionada, 3.744 menos que el año pasado.

Como declaró a La Tercera Alfonso Vargas, subsecretario para las Fuerzas Armadas, las cifras no son alarmantes pues el número definitivo de inscritos depende de otros factores, como presentarse efectivamente al llamado, no tener antecedentes judiciales y cumplir los requisitos médicos y sociales exigidos.

Los datos indican que un 16% de los postulantes no llega al llamado y un 40% de ellos es excluido por diferentes razones.

El Ejército tiene contemplado acuartelar a 9.417 jóvenes entre los postulantes de este año.

Razones de la baja

El subsecretario Vargas sostiene que en un país con pleno empleo y un gran abanico de opciones educacionales, que son competencia directa a una carrera militar, es normal encontrarse con estas bajas.

El número de cupos para postulantes también ha descendido, por lo que la disminución en los índices de acuartelamiento es planificada. Mientras en 2007 hubo 12.528 acuartelados, en 2012 esta cifra llegó a los 10.248.

En ese sentido, la idea es disminuir la cantidad de conscriptos para aumentar la cantidad de soldados de Tropa Profesional, contratados por un plazo de 5 años. “La preparación es cada vez más técnica, con personas más capacitadas”, señaló Vargas.

Desde la reforma al Servicio Militar el 2007, cuando se comenzó a privilegiar el acceso de inscritos voluntarios, la mayor cantidad de postulantes se registró el 2009 con 27.267 voluntarios.

Promoción y estímulo

Sin perjuicio de la tranquilidad del Ejército con las bajas cifras, se están tomando medidas que frenen dichos índices y estimulen el proceso voluntario, como el Programa de Verano, que finaliza el 24 de febrero.

Con el mismo objeto, existe el proyecto de ley que contempla un aumento del 60% de la asignación anual para los voluntarios que realicen el servicio, lo que supone un salto de $560 mil a $900 mil anuales.

Se espera que la moción sea presentada a comienzos de marzo y aprobada con rápidez, para que los voluntarios disfruten del beneficio desde el primer mes.