¿Habías oído del Control Electrónico de Estabilidad? Quizás lo escuchaste como ESP, o por alguna de sus variantes (VDC, VSC, ESC o DSC). Se trata de un sistema electrónico, que mediante sensores en un vehículo, activa los frenos de manera estratégica, en casos de emergencia como derrapes o movimientos de evasión. A contar de ahora, este sistema es obligatorio para los vehículos nuevos que vayan a ser comercializados en Chile.

Si estás pensando en comprar un nuevo auto, debes tener en cuenta que a contar del pasado lunes, todos los vehículos livianos nuevos que sean comercializados en Chile, deben incorporar como equipamiento de serie el sistema de Control Electrónico de Estabilidad, abreviado como ESP, por sus siglas en inglés (Electronic Stability Programme).

Se trata de una tecnología, que tal como dice su nombre, permite un control de estabilidad de un auto en caso de ciertas maniobras, y es uno de los elementos de seguridad obligatorio en Europa desde el 2014.

Norma obliga a la incorporación de sistema ESP

En el 2018, se publicó en el Diario Oficial (DO) la modificación del decreto N° 26 del 2000 del Ministerio de Transportes, que estableció la futura obligatoriedad para vehículos livianos de pasajeros (hasta 2.700 kilos), de contar con Sistema Antibloqueo de Frenos (ABS) y Programa Electrónico de Estabilidad.

La norma indica que la exigencia de este último sistema (ESP), para los nuevos modelos no homologados, se dará a contar 3 años después de la publicación en el DO, es decir, desde este lunes 3 de octubre.

Esto quiere decir que cualquier nuevo modelo que alguna marca desee incorporar en su oferta en Chile, deberá contar de serie con este sistema que, según las estadísticas, solo en la Unión Europea, ha salvado unas 15 mil vidas en los últimos 25 años.

Pero, ¿Qué es este sistema y cómo funciona?

¿Qué es y cómo funciona el Control Electrónico de Estabilidad ESP?

El Control Electrónico de Estabilidad es un sistema desarrollado por Bosch y Mercedes-Benz que ayuda al conductor a controlar el vehículo en casos concretos, especialmente de emergencias.

Si bien es conocido como ESP en gran parte del mundo, algunas marcas usan su propio nombre comercial para este sistema como VDC, VSC, ESC o DSC.

En concreto, se trata de un sistema electrónico, que con base a múltiples sensores dentro del vehículo, comprueba que el movimiento del volante sea correspondiente con la dirección real.

De acuerdo a lo explicado por Motor.es, el ESP activa distintas maniobras de frenado, de modo automático, en caso de que los mencionados sensores detecten una inestabilidad del vehículo, como en el caso de un derrape, o de una maniobra evasiva.

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¿Qué pasará con los vehículos que no tengan este sistema?

Es importante mencionar que la mencionada norma y la obligación de contar con el sistema ESP, es válido solo para vehículos livianos de pasajeros nuevos, se homologuen en Chile, antes de su inscripción en el Registro Civil.

Así, la exigencia no se aplica para vehículos usados, y tampoco para aquellos que pesen más 2.700 kilos, como camionetas y vehículos comerciales.