Medios en España dieron cuenta de una curiosa situación ocurrida el pasado fin de semana, cuando vecinos de una localidad llamaron a la policía debido a que los ruidos molestos de una fiesta clandestina no los dejaban dormir. Sin embargo no se trataba de una celebración, sino que del acto de un gato.
El hecho ocurrió en un pueblo llamado Lugo, cuando el pasado domingo residentes de un conjunto residencial llamado Ronda de Fontiñas denunciaron los ruidos que no les permitían descansar.
De acuerdo al informe de diario El Mundo, esa noche los policías fueron hasta el departamento pero sólo se encontraron con que en el un lugar había un gato.
Horas más tarde los funcionarios contactaron al dueño del inmueble, quien entregó la información de lo que allí había ocurrido en aquella jornada.
Según el documento, el hombre explicó que su gato tenía por costumbre prender con sus patas la radio del hogar, a lo que sumaba que, también con sus extremidades, movía la manilla del volumen.
En la instancia se dio a conocer que, a mediados de esa semana, también había llegado una denuncia por ruidos molestos desde el mismo departamento, el cual estaba deshabitado.
Tras conocer los antecedentes, la policía en España confirmó la emisión de una Ordenanza de Protección Ambiental, debido a los ruidos molestos que hubo en las dos jornadas.
Asimismo, se exigió al dueño dejar el equipo de música lejos del alcance del animal, para evitar que la situación se vuelva a repetir.
Hay que señalar que las fiestas clandestinas se han triplicado en aquel país luego que el gobierno bajara el estado de excepción, dispuesto a comienzos de 2020 por la pandemia.
