Es natural que los jóvenes desde antes de ser mayor de edad sientan el deseo de aprender a conducir para poder movilizarse por su propia cuenta, y muchos padres los complacen enseñándoles tempranamente. Sin embargo, en la sociedad aún hay debate sobre cuál es la edad pertinente para comenzar.

Sin embargo, los adultos deben tener en cuenta que la responsabilidad y madurez juegan un papel muy importante y son elementos fundamentales a la hora de tomar la decisión.

Sea como sea, las edades apropiadas para empezar dependen también de las políticas de cada país, aunque la mayoría coincide con una edad mínima de 16 años, siempre que se cumplan ciertas condiciones.

Pero ¿los 16 años es realmente una edad apropiada?

Los expertos aseguran que tanto jóvenes como adultos mayores son quienes están más propensos a sufrir accidentes de tránsito, por lo que los 16 años no es la edad más propicia para adquirir esta responsabilidad.

Durante la adolescencia, los conductores se distraen más fácilmente y están más propensos a querer probar sus habilidades conduciendo a altas velocidades, además muchos de ellos tampoco están muy apegados a las normas de seguridad vial.

“Si bien los jóvenes pueden llegar a ser más astutos y ágiles al volante, su nivel de responsabilidad es mucho más bajo que el de un adulto, por lo que pueden estar más propensos a verse involucrados en accidentes de tránsito”, explicó Juan José Santa Cruz, gerente general de EstoySeguro.cl.

Es por ello que la edad ideal para aprender es pasado los 18 años, un momento donde las personas son capaces de asumir la responsabilidad y entender la gravedad de sus actos.

De todas formas, se recomienda que los jóvenes sean inscritos en escuelas de manejo antes de circular por las calles, de manera que los conocimientos aprendidos sean óptimos y exista mayor seguridad al momento de situarse tras el volante.

Por otro lado, para frenar los nervios que en muchas ocasiones suelen jugarles una mala pasada a los principiantes, es necesario que vayan acompañados de algún adulto que los guíe en sus primeros intentos en las calles.

De igual forma, es importante destacar que la madurez ayuda mucho en este proceso y la edad no siempre está relacionada con el nivel de responsabilidad de una persona.