Puede parecer una técnica de nombre impronunciable, algo aspiracional, pero lo cierto es que el Ho’oponopono está lejos de ser un método “de moda”, inventado por algún gurú moderno.

Este arte, pronunciado ‘ho-o-pono-pono’, es una técnica milenaria nacida en Hawái y practicada en diversas zonas de la Polinesia, que se basa en la resolución de problemas mediante la reconciliación y el perdón.

Según el ‘Diccionario Hawaiano’ de la erudita local Mary Kawena Pukui, este método consiste en una “higiene mental” que corrige las relaciones y pone en orden nuestra vida mediante la oración, discusión, confesión, arrepentimiento, compensación mutua y el perdón. Sin ir más lejos, la palabra “Pono” tiene diversas acepciones en dicha lengua, incluyendo “bondad, rectitud, moralidad, procedimiento correcto y bienestar”, entre otras.

Si bien se ha practicado durante siglos, esta técnica alcanzó popularidad el siglo pasado con la historia del Dr. Ihaleakala Hew Len, un venerable guía de actuales setenta y tantos, quien en su juventud habría ayudado a sanar a un pabellón entero de pacientes criminales y mentales mediante la aplicación de la técnica del Ho’oponopono, sin siquiera reunirse cara a cara con ninguno de ellos.

Durante más de 4 años, Hew Len asumió el cargo de psicólogo del Hospital Estatal de Hawái, donde estudió en profundidad los casos de cada paciente y se reunió frecuentemente con el personal médico para comprender sus historias. Mientras revisaba a cada uno de los internos, practicaba a la distancia los principios de este método y la auto-sanación, informó la web colombiana dedicada a este arte.

Increíblemente, la historia cuenta que tras su trabajo la situación de cada paciente fue mejorando día a día, los índices de violencia bajaron y quienes trabajaban en el recinto podían dar fe de los resultados de la técnica del doctor. Consultado sobre cómo lo hizo, el experto afirmó que logró su objetivo “Sanando en mí la parte que había creado sus enfermedades”, agregando que las personas son 100% responsables de todo lo que está presente en sus vidas, tanto lo bueno como lo malo.

Moyan Brenn | Flickr (CC)
Moyan Brenn | Flickr (CC)

Las cuatro frases del Ho’oponopono

Pero, ¿cómo se alcanza este estado de meditación y auto-sanación logrado por Hew Len? Para ello, las personas deben repetirse a sí mismas y regir sus acciones en base a cuatro frases fundamentales: “Lo siento”, “Perdóname”, “Gracias” y “Te amo”, las cuales funcionan como llaves de apertura que permiten simplificar lo problemático, calmar la tensión interna y sanarnos, al liberar memorias dolorosas o escenas internas que nos perturben, según declaró la doctora argentina Gabriela Paz, especialista en ayurveda, homeopatía y psicoterapia.

“Al repetir ‘Lo siento’ no se habla de culpa ni pecado, sino de ser responsable de esa memoria interna que atrae problemas. ‘Perdóname’ pretende la reconciliación consigo mismo por haber traído una situación dolorosa. ‘Te amo’, transmuta la energía bloqueada y permite que siga fluyendo y ‘Gracias’, expresa la fe, en que todo será resuelto de la mejor manera para los involucrados”, declaró por su parte la terapeuta chilena de Ho’oponopono, Paulina Beyer; colaboradora de una de las discípulas del Dr. Hew Len, la conferencista internacional argentina Mabel Katz; en conversación con El Mercurio.

“Al hacer el Ho’oponopono se neutraliza la energía que asocias a una determinada persona, lugar o cosa, donde no es necesario revivir ningún sufrimiento, no importa saber el porqué del problema, de quién es la culpa, ni su origen (…) Es una meditación de 24 horas al día, 7 días a la semana, todo el año. Es siempre volver al vacío, donde están todas las respuestas y las soluciones a nuestros problemas”, agregó Beyer.

En este sentido, la técnica hace un llamado a “soltar” toda situación que nos genere problemas y dar las gracias, porque esto coloca automáticamente a la persona por encima de dichas situaciones.

“El dolor es inevitable, pero el sufrimiento es optativo, los problemas son oportunidades pero sufrir por ellos” es opcional, concluyó Paulina Beyer.

Nickolai Kashirin | Flickr (CC)
Nickolai Kashirin | Flickr (CC)

Las claves para su efectividad

María Soledad Miranda, autora y terapeuta chilena de Ho’oponopono al igual que Beyer, declaró en entrevista con el Diario La Segunda que una de las claves para la efectividad de esta práctica es comprender “que cada uno de nosotros es 100% responsable (no ‘culpable’) de todo lo que nos sucede y de todo lo que sucede a nuestro alrededor, (pues) el universo físico es una realización de mis pensamientos”.

“Si mis pensamientos son cancerígenos, ellos crearán una realidad física cancerosa… y si mis pensamientos son perfectos, ellos crearán una realidad física que desbordará amor (…) Hay un dicho que reza ‘A lo que me resisto, persiste’. Si estoy preocupada de que me puedo resfriar este invierno, lo más seguro es que caiga en cama (…) O cuando dicen ‘viene un gran terremoto en el norte de Chile’, ¿qué están haciendo? ¡Llamando al temblor!”, afirmó la especialista.

Considerando aquello, Miranda cree firmemente en que las personas deben “desprogramarse” de todas aquellas “memorias” que las predisponen a realidades dolorosas. He aquí otra clave del Ho’oponopono, la denominada ‘Ley de la Atracción’ y el convencimiento de que la solución a nuestros problemas llegará “de manera perfecta” y “del modo más insospechado”, declaró la experta al diario.

“Los humanos tenemos alrededor de 60 pensamientos por minuto, mínimo. Y cada pensamiento, necesariamente, va unido a una emoción”. Teniendo esto en cuenta, Miranda considera que guardar pensamientos negativos “es tan absurdo como tener un álbum de fotos con los peores momentos de nuestras vidas: los funerales, los accidentes, las enfermedades”. Por ello, las personas necesitan hacer una especie de “selección” de sus pensamientos, sobre todo, porque aquellos positivos atraerían buenas cosas.

En este contexto, explicó que debemos deshacernos de pensamientos como “‘La vida es difícil’, ‘Ahorra dinero por si te pasa algo malo’, o ‘No andes sin zapatos, que te vas a resfriar”… ¡Pamplinas! No me va a pasar nada malo ni me voy a resfriar si yo me preocupo de no crear esas realidades“, dijo tajante la terapeuta.

Moyan Brenn | Flickr (CC)
Moyan Brenn | Flickr (CC)

¿Cuáles son los efectos de esta práctica?

De acuerdo a la doctora Gabriela Paz, el Ho’oponopono tiene efectos muy positivos en diversos aspectos de nuestras vidas:

– “Cuando estamos muy enojados, tensos y con sentimientos negativos, las vibraciones que emitimos atraen más negatividad, dolor y malestar. Al repetir estas sencillas palabras (las 4 frases), la energía cambia. El cerebro recibe el código y significado de cada palabra. La palabra es creadora, pensamos en forma de palabras que crean ideas e imágenes”.

– “La vida es energía pura y al liberar nuestra mente y corazón de la negatividad, de los reproches y dejar de encerrarnos en el dolor, todo fluye y va hacia un destino mejor“.

– “El Ho’oponopono libera la toxicidad en uno mismo y la necesidad de mantener escenas de dolor en la mente, ayuda a trascender y transmutar toda negatividad“.

– Finalmente, “Permite activar la fuerza creativa”.

En resumen, Paz recomienda probar este arte: “El método es muy sencillo y hace la vida más simple. Vale la pena probarlo”, declaró.

Si estás interesado en aprender más sobre esta milenaria técnica hawaiana, puedes ingresar a las páginas web www.hooponopono.cl y www.hooponoponochile.cl, donde encontrarás testimonios de practicantes e información sobre talleres a dictarse en diversas ciudades de nuestro país.