Parte de la tenencia responsable de mascotas es saber sobre cuáles son las formas de crianza para cuando uno decide tener más de una en casa.
Es por ello, que el médico veterinario y docente de la Universidad del Pacífico, Claudio Delgado, explica cuál es la clave para la socialización temprana de nuestros animales domésticos, tanto para casos de cachorros con otros cachorros, con personas o con otros animales de distintas especies.
Para el primer caso, el profesor de Medicina Veterinaria comenta que la edad ideal para realizar “esta junta” es lo antes posible. “Ojalá a los 2 meses cuando normalmente los cachorros son destetados y se van a sus nuevos hogares”, señala.
Uno de los ejemplos clásicos, indica Claudio Delgado, es un cuando se tiene un perro de 1 año y se quiere llevar otro perro a casa. “Lo que debemos realizar es acercar al nuevo cachorro hacia la nariz del perro de 1 año, porque de esta manera el animal mayor lo comenzara a reconocer como un par y no como una amenaza”, aconseja.
El médico veterinario agrega que se debe ser equitativo en el cariño entregado a cada una de las mascotas. “Jamás dejar de dar cariño al primer perro para entregárselo al segundo. El cariño se comparte, no es exclusivo de uno solo. En caso de cometer ese error es probable que el perro de más edad se sienta desplazado y comience a ver al nuevo integrante como una amenaza”, plantea.
En este punto, el especialista comenta que técnicamente no se puede hablar de celos entre las mascotas pero “sí puedo afirmar que cada integrante reclamara lo que le corresponde o mejor dicho lo que el propietario siempre le entregó y que ahora por la llegada de otra mascota, ya no se lo están entregando normalmente”.
“En estos casos se pueden producir ataques de mordidas por sentirse desplazados, así que debemos repartir nuestro cariño con ellos”, indica.
El profesional también hace observaciones acerca de la jerarquización que podría definirse entre ellos. “Ésta se definirá por ellos mismos. Es decir, habrá un dominante y un dominado, ya que en la naturaleza esta práctica es habitual y normal”, explica.
“En palabras simples no puede haber dos dueños de casa en una sola. Además, hay que tener presente que, al tener dos machos o dos hembras, es muy común que haya disputas o de frentón peleas por terreno, alimento, agua, reproducción, etc”, añade.
Claudio Delgado señala también que parte de la socialización es la que se realiza con los seres humanos. “Para ello saber que debemos hacernos respetar por nuestras mascotas desde que éstas son pequeñas, lo que es muy distinto a que nos obedezcan por miedo”, aclara.
Y para que esto funcione, explica que se debe seguir algunas reglas:
1. Se debe dar órdenes cortas y con tono de voz marcado y firme y recompensamos con cariño.
2. No tironearlo o utilizar técnicas de adiestramiento primitivas. Éstas solo provocan una involución de la personalidad de nuestras mascotas.
3. Entender que un perro que tenga respeto por su amo será un perro equilibrado, protector, paciente, socialmente estable y cariñoso. Al contrario, un perro miedoso será desequilibrado, asustadizo, ansioso, poco amigable y muy probable sea un perro mordedor, no por agresividad sino por miedo.