La jornada de este viernes el Juzgado de Garantía de Coronel aceptó la suspensión condicional del procedimiento por dos años, contra los tres ejecutivos de Enel, ex Endesa, investigados por la contaminación en la comuna.

De esta manera se aceptó la salida alternativa del procedimiento, respecto de los encargados de la central termoeléctrica Bocamina: Mario Enero, Pablo Arnés y David Poblete, imputados por propagar e introducir agentes contaminantes en el mar, agentes que provenían justamente de la instalación.

Asimismo la justicia determinó que la empresa debe elevar las medidas de mitigación, lo que se traduce en que por dos años deben llevar a cabo monitoreos de los ductos para determinar eventuales daños o roturas, vigilancia de aguas subterráneas a fin de evitar contaminación en las costas de Coronel, así como también el monitoreo de metales pesados.

Si la central incumple las medidas impuestas durante el plazo otorgado por tribunal y se compruebe que existe contaminación, la empresa será llevada a un juicio oral por esta causa.

Al término de la audiencia, el abogado de Enel, sostuvo que el proceso finaliza sin que se establezca la responsabilidad de la empresa.

En los seis años de diligencias, la Fiscalía acreditó que las cenizas contaminantes encontradas en Coronel y que contenían altas concentraciones de metales como mercurio, zinc o vanadio, habían sido emitidas desde Bocamina.

Según se dio a conocer, los motivos del Ministerio Público para proponer la suspensión condicional del procedimiento se amparan en las bajas penas por el delito. Por este caso los imputados arriesgaban una pena de 541 días de cárcel, además del pago de una multa máxima de 140 millones de pesos.