A primera hora comenzará el martes la demolición de la toma Calicheros de Quilpué, en la región de Valparaíso. Carabineros informó que se detendrá a las personas que se opongan al cumplimiento de esta orden judicial.
Tras varios años de lucha, la familia del empresario Alejandro Correa, víctima de sicariato, podrá recuperar este terreno que fue usurpado ilegalmente.
De acuerdo con la información entregada por las autoridades, a las 7:30 horas del martes llegará la maquinaria para demoler las construcciones.
En ese contexto, el teniente coronel Mauricio Burgos, subprefecto de los servicios 2, detalló que la demolición comenzará a primera hora en conjunto con personal del Serviu.
También confirmó que las familias de la toma están retirando sus enseres y desarmando sus viviendas. “El llamado es a la gente para que se retire del lugar”, dijo el teniente.
En ese mismo contexto, confirmó que, de haber una oposición al cumplimiento de esta orden judicial, “Carabineros está facultado para usar la fuerza pública y hacer que estas personas se retiren del lugar”.
A modo de ejemplo, explicó que si una persona decide quedarse al exterior de la casa, personal policial la invitará a dejar el lugar para que la maquinaria pueda ejecutar la demolición, pero si la negativa persiste, “lamentablemente van a tener que ser detenidos”.
Albergues para familiar
La alcaldesa de Quilpué, Carolina Corti, informó que el albergue tiene casi un 90% de su habilitación. “Mañana recibiremos a las familias que no han podido efectuar su red de apoyo posterior al desalojo”.
Junto con eso, afirmó que en el albergue se abastecerán las primeras necesidades, con kits de aseo, con duchas implementadas y con la habilitación de un espacio para los menores.
“Se ha trabajado arduamente por dar un trato digno a aquellas personas que van a estar con nosotros durante las primeras 72 horas”, recalcó la jefa comunal.
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