La seremi vocera de Gobierno, María Fernanda Moraga, tildó de "negacionismo y odio" el retiro de una placa conmemorativa en calle habana, a 50 años del Golpe de Estado, donde funcionó una sede de la Central Nacional de Informaciones (CNI), durante la dictadura del general Augusto Pinochet.
La seremi vocera de Gobierno en la región de Valparaíso, María Fernanda Moraga, calificó como negacionismo y una señal de odio contra la memoria la negativa de vecinos del sector Recreo de Viña del Mar, donde funcionó una sede de la Central Nacional de Informaciones durante dictadura, y ahora se pretende instalar una placa conmemorativa por las víctimas de tortura, en el marco de los 50 años del Golpe de Estado.
En concreto, pese a contar con el decreto alcaldicio para ser instalada en la vía pública del edificio ubicado en calle Habana 480 de la ciudad jardín, no ha sido posible colocarla tras la oposición de los vecinos.
Incluso, en medio de una conmemoración en el sitio, los lugareños se mostraron en contra, haciendo el retiro de dicha placa.
La seremi de Gobierno, María Moraga, apuntó a que no debe existir un doble discurso ante hechos que ocurrieron y son conocidos a nivel mundial, además de los estudios e investigaciones que existen al respecto, por lo que repudian lo ocurrido en el sector de Recreo.
“Una señal de odio y de repudio a la acción de memoria. Nosotros repudiamos cada acto que sea de negacionismo. El retirar una placa es un acto de negacionismo; de negar los hechos de la historia, de negar que en Habana hubo un centro de tortura, que hay relatos, que hay testimonios, familias, detenidos desaparecidos que estuvieron en ese espacio. Por lo tanto, nosotros repudiamos esos hechos”, aseveró.
El recinto Habana era uno de los centros secretos de detención y tortura que se mantenían en esa época a lo largo del país. Su existencia fue verificada por un juez en octubre de 1983, después que los abogados de 11 estudiantes hicieran la denuncia de sus arrestos a las Cortes locales, según indica el Informe de la comisión Valech.
Asimismo, Graciela Jiménez, presidenta de la Comisión Chilena de Derechos Humanos en Viña del Mar, afirmó que la placa se instalará igual, destacando que “ya no estamos en Dictadura”, e hizo énfasis en que cuentan con la autorización municipal.
“Esta placa no se pone en los edificios ni la casa de ellos, se pone en la vereda, en lo público, y tenemos la autorización y el decreto alcaldicio en el cual nosotros solicitamos ese permiso”, recalcó.
“Lo que vamos a hacer ahora, es poner la placa en unos días más, pero de que se va a poner, se va a poner, porque aquí no estamos en los tiempos de la dictadura en que eran dueños de todo. La calle no es de ellos”, afirmó.
Radio Bío Bío consultó sobre este problema al municipio de Viña del Mar, sin embargo, no se refirieron a esta situación.
Cabe mencionar que la instalación de placas conmemorativas, de 40×40 cm, en el pavimento próximo a centros de detención y tortura en dictadura, ya fueron instaladas en las calles Jackson, Álvarez y Agua Santa, mientras que en Habana, se mantiene el pavimento en blanco.
