Las obras del nuevo hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar ya se encuentran en tierra derecha de cara a su entrega final, después de varios atrasos e incluso multas que la empresa a cargo de su construcción ha debido pagar durante todo este proceso.
Los trabajos de construcción muestran un 71% de avance y la obra gruesa está prácticamente lista, que tienen una inversión cercana a los US$150 millones, poco más de $98 mil millones.
Pese a la envergadura e importancia de la obra en materia sanitaria, esta ha sufrido constantes atrasos en su entrega final, porque originalmente el nuevo recinto debía entregarse durante 2017.
Esto motivó que incluso la empresa constructora OHL -responsable del proyecto- debiése cancelar 11 multas por atrasos de distinto tipo.
Una dificultad que según el director del Servicio de Salud Viña del Mar Quillota, Juan José Mendoza, ya dio por superada.
Pero lo realmente importante -más allá del nuevo edificio- son las prestaciones adicionales, camas y unidades que ayudarán a mejorar la cobertura que el actual recinto tiene, donde practicamente se triplicarán el número de pabellones, pasando de 8 a 21, y también un aumento en el numero de camas.
El director del Hospital, Leonardo Reyes, confirmó que las obras también incluyen la implementación de una segunda etapa, donde se incorporarán también más camas y nuevas unidades.
En tanto, la seremi de Salud, Maria Graciela Astudillo, quien visitó las obras recordó que la construcción de este recinto es la más grande y compleja en este punto del país y que -pese a las dificultades- los trabajos en otros hospitales de la región siguen en proceso.
La primera y más importante etapa del nuevo hospital viñamarino será entregada durante el segundo semestre de 2018, y según los diversos estudios realizados por autoridades y especialistas, deberá tener una vida util de poco más de 70 años.
