Jovita Aravena a sus 73 años jamás dejó de preocuparse de su hijo, Juan Ilufi. El hombre desde adolescente fue diagnosticado con una esquizofrenia paranoide, lo que le hacía desconocer a sus cercanos.
Hasta la calle Los Coigües de la población Padre José Fernandez, ex Techo Para Todos, llegó en primera instancia Bomberos esa tarde del 6 de noviembre de 2017.
Los voluntarios dieron cuenta de una agresión a una adulta mayor, por parte de familiares.
La tragedia estaba desatada, el paciente había ultimado a su madre con golpes de puño y con elementos contundentes.
El detenido fue trasladado hasta un cuartel policial y después al servicio de psiquiatría del hospital regional, donde estuvo en tratamiento ya que cuando ocurrió el crimen estaba descompensado. Su madre justamente le había llevado medicamentos.
Tres años después del asesinato, la fiscal Pamela Salgado, explica que en este caso no se trata de un juicio normal, por la condición médica del acusado.
Ilufi, relató la persecutora, jamás supo que le quitó la vida a su progenitora, ya que por su enfermedad la desconocía, pensando que se trataba de alguien que le haría daño.
Por lo mismo fue declarado culpable de un delito de homicidio y no de parricidio que es lo que correspondería.
La Fiscalía pedirá 10 años y un día de internación en una dependencia donde pueda ser tratado.
