El sacerdote Walter González, cercano al obispo de Osorno Juan Barros, se refirió a la carta escrita por la red de comunidades de laicos y laicas de Chile, explicando que es momento de frenar esta actitud empoderada que los hace creer que son dueños de la Iglesia Católica.

Dicha misiva escrita por los laicos fue hecha para evidenciar el descontento de esta organización religiosa en torno a los últimos acontecimientos ocurridos en las Diócesis de Osorno y Talca.

A esto, el presbítero sostuvo que no pueden seguir solicitando “la cabeza a medio mundo” dentro de la institución eclesiástica, apelando a que no es la forma de reconstruir la iglesia.

En la misma instancia, llamó a ser misericordioso, ya que todos podemos cometer errores. Esta actitud -aseguró- solo demuestra la división que existe dentro de la Iglesia Católica.

También, dijo que sí bien no está en contra de la libertad de expresión, los integrantes de la iglesia que no pueden estar en comunión con las autoridades religiosas no se pueden denominar católicos.

Llamó a estar en paz con la institución eclesiástica y disipar las asperezas, sin embargo, también expresó que los laicos no pueden creerse superiores a las autoridades religiosas.