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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

Tribunal declara culpable a adolescente por femicidio íntimo de Paulina Cáceres Espinoza en Ovalle. El acusado, identificado como L.M.P., fue condenado por el asesinato de la estudiante de tercero medio, ocurrido en marzo de 2024. Pericias balísticas demostraron que el disparo fue intencional, desvirtuando la versión de accidente del imputado. Fiscalía busca 10 años de internación en régimen cerrado, mientras la defensa pide una pena menor.

Un año y cuatro meses después del asesinato de la estudiante Paulina Cáceres Espinoza, el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Ovalle, en la región de Coquimbo, entregó su veredicto.

El acusado, un adolescente de 17 años al momento de los hechos e identificado por las iniciales L. M. P, fue declarado culpable por el delito de femicidio íntimo, además de tenencia ilegal de arma de fuego adaptada y tenencia ilegal de municiones.

La Fiscalía logró acreditar ante el tribunal que el crimen no fue accidental, ni ocurrió en contexto de manipulación o juego, como sostuvo el imputado en su defensa. En ese sentido, las pericias fueron claves para demostrar que el disparo fue intencional y dirigido.

Según explicó el fiscal jefe de análisis criminal y focos investigativos, Eduardo Yáñez, “fue relevante para el tribunal la pericia balística del Labocar de Carabineros de Coquimbo”.

“Esto no fue un disparo accidental, no fue en contexto de manipulación del arma o de un juego como pretendió sostener el imputado. Hubo dolo directo de matar a la víctima, por la posición en que ella recibió el disparo y por la trayectoria del proyectil”, complementó.

Femicidio de Paulina en Ovalle

Recordemos que el hecho ocurrió el pasado 31 de marzo de 2024. Paulina, quien era estudiante de tercero medio del Colegio Santa María Eufrasia de Ovalle, se encontraba en la vivienda del acusado (su pareja en ese entonces), cuando recibió un disparo en la cabeza. Fue trasladada al Hospital Provincial de Ovalle, donde falleció al día siguiente, el 1 de abril.

Ambos jóvenes tenían 17 años y la relación entre ellos llevaba tres meses. Desde el primer momento, la familia de la víctima sospechó que se trataba de un femicidio. Por su parte, la defensa del imputado intentó instalar la versión de un accidente.

Por esto, la Fiscalía solicitó la pena máxima contemplada en la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente: 10 años de internación en régimen cerrado con programa de reinserción social. La defensa, en cambio, pidió una pena menor de 3 años, en régimen semicerrado.

Para Carolina Pizarro Espinoza, hermana de Paulina, “lo que hizo no habla de un niño, habla de una persona peligrosa, de un psicópata. No me cabe duda de que hay otras víctimas. A mi hermana le tocó la peor parte, pero este no fue un hecho aislado. Él va a volver a hacer daño”.

La familia espera que el tribunal imponga la sanción más alta posible. Sin embargo, Carolina cree que la justicia sigue siendo insuficiente. “Aunque le den los 10 años, sabemos que eso no significa que los va a cumplir completos. Siempre hay beneficios. La ley debería ser más dura, sobre todo en casos como este, que son femicidios”, dijo.

Lectura de sentencia

Tras el veredicto condenatorio, la causa entró en su etapa final. La audiencia de lectura de sentencia, en la que se conocerá la pena que deberá cumplir el condenado, fue programada para el jueves 7 de agosto.

En esa instancia, el tribunal decidirá si acoge la solicitud de la Fiscalía, que pide la pena máxima de 10 años de internación en régimen cerrado con programa de reinserción social, o si opta por una sanción menor, como la que plantea la defensa.