En plena precordillera del Valle del Elqui, en la comuna de Paihuano, región de Coquimbo, fue encontrado la tarde del miércoles el cuerpo sin vida de un hombre de 51 años al interior de una carpa, quien tenía una data de muerte de aproximadamente dos meses.
El cuerpo sin vida de un hombre de 51 años, identificado como Miguel Ángel Balada Valero, fue encontrado la tarde del miércoles 12 de enero en la comuna de Paihuano, región de Coquimbo. El cadáver tenía una de muerte de aproximadamente dos meses.
El impactante hallazgo se produjo por parte del dueño de un predio, quien dio aviso a Carabineros luego de encontrar el cuerpo al interior de una carpa instalada en su terreno.
El propietario, perteneciente a la comunidad indígena Canihuante, había sido alertado a principios de la semana por uno de sus trabajadores, quien en una de las rondas vio la tienda.
A raíz de este llamado, decidieron ir a constatar la situación, encontrándose con el occiso en estado de descomposición y con todas sus pertenencias intactas.
Domicilio en la región Metropolitana
Según información recabada por El Día, no existía una denuncia por presunta desgracia relacionada con el nombre de Miguel Ángel Balada Valero, quien estaba domiciliado en San José de Maipo en la región Metropolitana.
En tanto, lugareños dijeron que por la calidad de las pertenencias encontradas, no se trataría del típico mochilero que arriba a la localidad de Cochiguaz.
Los primeros antecedentes del fallecido, apuntan a que habría participado como un dirigente activo del Comité de Adelanto Juntos Podemos Más de Baño Morales.
Solo en el lugar
Tras denunciar el hecho a Carabineros, el fiscal de Vicuña, Juan González, instruyó la presencia de la Brigada de Criminalística de la PDI para esclarecer la identidad del cuerpo y determinar las circunstancias de su fallecimiento.
El jefe de la Bicrim de Vicuña, subprefecto Daniel Maldonado, precisó que “la data de muerte de esta persona era de a lo menos dos meses y permanecía solo en ese terreno. Por lo tanto, no habría sido avistado por los vecinos del lugar, hasta el día miércoles”.
Si bien el Servicio Médico Legal tendrá que determinar las causas de su muerte, en primera instancia no existiría intervención de terceros.
La carpa no se podía ver
Respecto a por qué no fue vista antes la carpa, Marta Ahumada, concejala de Paihuano y vecina del sector, señaló que al ser precordillera no hay muchas personas que circulan por el lugar.
“Existe un portón de acceso para la precordillera y sólo tienen llave los residentes, ya que se está tratando de declarar ese sector Santuario de la Naturaleza. Esta persona ingresó porque algún residente le pasó la llave o lo autorizó, o simplemente lo hizo a la mala, como muchos de los visitantes que llegan y no entienden que son terrenos privados”.
Además, precisó que la carpa estaba al lado de una roca muy grande que evitaba ser vista.
“Cuando llegó el trabajador con el dueño del predio, sintieron el mal olor y estaba la carpa cerrada, pero como tenía varias de sus cosas afuera de la tienda, pensaron que estaba durmiendo. Abrieron y vieron el cuerpo. No tocaron nada e incluso ellos no sabían si era hombre o mujer, porque tenía el pelo largo, medio canoso. Enseguida llamaron para pedir el número de Carabineros”, puntualizó Ahumada.
