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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

ME-O se pronunció sobre el fin de Punta Peuco como cárcel para violadores de DD.HH., señalando la necesidad de tratar a los presos con severidad si no entregan información ni piden perdón. Afirmó que debe dejar de ser un penal de privilegios, pero abogó por elevar los estándares carcelarios en general para garantizar la rehabilitación de los reclusos.

El candidato a la presidencia, Marco Enríquez-Ominami (ME-O), se refirió la tarde de este lunes al anuncio del Gobierno sobre el fin de Punta Peuco como cárcel para violadores de derechos humanos y se refirió a la crisis carcelaria que existe en el país.

Con la toma de razón por parte de Contraloría, informó el Presidente Gabriel Boric, el polémico penal pasará a ser una cárcel común, y no una de “privilegios” como ha sido catalogada por gran parte del oficialismo.

En esta línea, ME-O señaló que los presos de la cárcel, mientras no compartan “buena parte de la información que siguen teniendo y no pidan perdón, corresponde que tengan el trato más severo del punto de vista penal”.

Sin embargo, añadió que “nos parece bien que el penal de Punta Peuco deje de ser un penal de privilegios, eso sí, también nos gustaría nivelar hacia arriba”.

El candidato explicó sus dichos y señaló que “no se trata de bajar los privilegios de Punta Peuco, creyendo que los presos, las decenas de miles de presos, tienen cárceles que les permiten rehabilitarse”.

ME-O agregó que las otras candidaturas buscan “torturar al ser humano que cometió un delito, nosotros no, queremos que los presos cumplan en rehabilitación”, y aseguró que en su proyecto contemplan un plan de cárceles.

“Queremos cárceles dignas, que no transformen a los presos en pedazos de carne que se tienen en una esquina. No nos gusta Punta Peuco, tampoco nos gustan las cárceles comunes. Entonces, tampoco nos va a hacer gracia que el debate sea Punta Peuco. Preocuparnos de las cárceles que no rehabilitan y no permiten reinserción”, recalcó.

Frente a las críticas de la oposición respecto al cierre, como por ejemplo el de José Antonio Kast, aseguró que es porque los candidatos de “derecha dura, negacionista” le hablan a un “público que en realidad le perdió el sentido al debate de la dignidad de la historia”.