856 casos por abandono y maltrato animal se registraron en Chile durante el primer semestre de este 2021, de acuerdo a cifras entregadas por la Brigada Investigadora de Delitos Contra el Medioambiente y Patrimonio Cultural (Bridesma) de la PDI.

Estos hechos representan una cruda realidad que ha comenzado a develarse especialmente tras la aprobación de la Ley Cholito y debido a que cada vez las comunidades se atreven más a acusar esto episodios ante la justicia.

En conversación con BioBioChile, el comisario Francisco Valdenegro de la Bidema analiza los números detrás de los episodios que incluyen maltratos, desnutrición y hacinamiento.

“Gracias a las redes sociales y la tecnología, han aumentado las evidencias que tenemos de maltrato. La ciudadanía se ha ido concientizando y tiende a grabar cualquier tipo de agresión sobre un animal, y eso ha ayudado para las investigaciones. Además se han hecho las denuncias como tal”, comenta el detective.

“Este año no se ha visto tanto como en años anteriores, agresiones en contra de los animales, sino que más bien hemos tenido casos relacionados a la mantención de los mismos”, explica Valdenegro.

Los casos llevados a cifras

De acuerdo a cifras revisadas por BioBioChile, durante el primer semestre de 2021 se anotaron 856 casos de abandono o maltrato animal a nivel nacional. Si nos vamos a 2019, encontramos que durante todo ese año la cifra llegó a los 2056 casos, mientras que en todo el 2020 fueron 1825.

En cuanto a las regiones, la Región Metropolitana es la que se ubica en el primer puesto con 262 casos entre enero y junio de 2021.

En tanto, la región de Valparaíso se ubica en el segundo lugar con 127 casos, seguida por la región del Maule (56), la región del Bío Bío (54) y la región del Libertador General Bernardo O’Higgins (54).

Por su parte, la región de Tarapacá es la que menos casos presenta (8) seguida de cerca por la región de Magallanes y la Antártica Chilena (11).

Denuncias vs flagrancia

Los 856 servicios policiales asociados al abandono o maltrato animal registrados por la PDI este 2021 se desglosan en cinco pilares: denuncias (274), instrucciones particulares investigativas (160), instructivas (46), ordenes de investigar (366) y procedimientos por flagrancia (10).

Si nos remitimos netamente a las denuncias, encontramos que la región Metropolitana ocupa la primera ubicación en los primeros seis meses de este año con un total de 59, seguida por la región de Valparaíso (30) y la región del Libertador General Bernardo O’Higgins (27).

En la vereda contraria, las que menos denuncias presentan son la región de Ñuble y la región de Tarapacá, con cuatro cada una.

Se debe tener en cuenta que la “denuncia” es el medio por el que cualquier persona “puede comunicar del conocimiento que tuviere sobre la comisión de un delito, que puede ser directamente al Ministerio Público o a través de las Policías”. La “instrucción particular investigativa”, en tanto, es la orden emanada por un Fiscal donde señala diligencias únicas y específicas de investigación.

La “instrucción particular instructiva” es la orden emanada por un Fiscal con diligencias específicas de carácter no investigativo, como por ejemplo remitir un informe pericial, un set fotográfico, documentos, etc. Por su parte, la “orden de investigar” es aquella en la cual un Fiscal instruye en primera instancia practicar diligencias de investigación necesarias “para consignar y asegurar todo cuanto condujere a la comprobación del hecho investigado y a la identificación de los participantes del mismo, junto con otra instrucciones y diligencias investigativas específicas”.

Finalmente, el “procedimiento por flagrancia” es aquel que se desarrolla en virtud a la investigación de delitos flagrantes, conforme a los artículos 83, 129 y 130 del Código Procesal Penal.

Casos dramáticos

Dentro de los casos más impactantes en los que ha operado la Bidema, tenemos el de cuatro perros de raza galgo, tres machos y una hembra, los cuales se encontraban en pésimo estado y amarrados en una casa en Pirque. Los ejemplares estaban en una condición corporal 1 de 5, es decir, un estado de desnutrición avanzado. Además, presentaban una leve deshidratación.

El dueño de los animales, un hombre de 65 años que vive en el domicilio, fue detenido por el delito de maltrato animal flagrante. El Fiscal de la causa instruyó la incautación y entrega de los animales a la Fundación Ayuda Callejeros.

“Este caso ha sido bien bullado, porque son animales que normalmente los ocupan para carreras”, señaló el comisario, añadiendo que son animales que necesitan de una constante actividad.

“Es un tanto chocante ver a los perros en los huesos prácticamente y sin ningún tipo de cuidado, porque tampoco tienen sus vacunas”, añadió el funcionario policial.

Bridesma
Bridesma

Otro caso emblemático es el de una persona que mantenía hacinados a 17 perros y 14 gatos en su hogar. Fue el pasado 7 de julio cuando los oficiales policiales comprobaron que aunque se encontraban en buen estado, los animales vivían en un entorno sumamente pequeño y desaseado, razón por la cual el imputado aceptó entregar en adopción a sus mascotas.

Cabe destacar que el hombre no contaba con los medios para asegurar el bienestar de los animales, así como tampoco tenía una red de apoyo que le permitiera disminuir la cantidad de animales que tenía.

Fue así como la Bridesma acordó con la agrupación de defensa animal “Fundación Ayuda Callejeros” realizar un operativo de adopción de los animales.

Bridesma

Por su parte, el 27 de julio quedó al descubierto un cruel caso de maltrato animal, cuando un perrito, al que le cortaron sus orejas, iba a ser enviado como encomienda desde Santiago a Antofagasta.

La situación fue reportada por la aerolínea SKY a la Bidema, indicando que se trataba de un cachorro macho de raza American Bully de aproximadamente 3 meses de edad.

Mediante un examen físico veterinario realizado por el comisario Valdenegro, de profesión Médico Veterinario, se determinó que al perrito le habían mutilado sus dos orejas, presentando tejido granulamatoso y secreción purulenta asociado a una infección crónica no tratada.

El ejemplar finalmente quedó a cargo de “Fundación Ayuda Callejeros” mientras la PDI determina qué pasará con él.

Bridesma
Bridesma

El llamado es a denunciar

Al respecto, el comisario Valdenegro fue enfático en recalcar la importancia de denunciar este tipo de hechos. “La idea es siempre hacer la denuncia, porque sirve para poner en conocimiento hechos que configuren, o se sospeche, que sean delito de maltrato animal”, explicó.

Una vez hecha la denuncia, se da cuenta a Fiscalía, la que instruye concurrir con personal veterinario, quienes a su vez además son policías. Una vez en el lugar, los funcionarios hacen un chequeo, un empadronamiento y realizan las consultas pertinentes, “por ejemplo verificar si el animal efectivamente está en ese estado que se denuncia por algún tipo de patología, porque a veces la gente puede confundir que un animal está en mal estado porque la persona no le está dando los cuidados y puede ser que en verdad esté enfermo”.

“Entonces, nosotros solicitamos al dueño las recetas médicas y todas las pruebas para poder constatar que el perro está en tratamiento o tiene alguna enfermedad. Si no es así, en ese caso se toma el procedimiento por maltrato animal, se detiene a la persona, se da cuenta a la Fiscalía y ésta es la que instruye si esta persona, a través de la evidencia con la que contemos, pasa a control de detención o queda apercibido y citado a la Fiscalía”, complementó.

Cabe señalar que la Bidema puede sugerir la incautación del animal si es que su integridad corre peligro en el lugar en que se mantiene, proceso en el cual trabajan con fundaciones animalistas para que puedan mantener al ejemplar mientras dure la investigación. De esta manera, será el tribunal el que determinará si el animal se devuelve a la persona o si definitivamente queda en un hogar con sus nuevos adoptantes.

Junto con reiterar que las denuncias han aumentado exponencialmente, el comisario aseveró que la Fiscalía también “ha hecho su parte, en el sentido de que han emanado una gran cantidad de decretos, investigando los temas de maltrato. Acá hay un tema más bien interinstitucional, en dónde todas las instituciones involucradas han cooperado desde su parte”.

“Por ejemplo el SAG o aduanas también han reportado casos de maltrato y dan cuenta a Fiscalía, desde donde nos llaman como la unidad especialista en estos casos, y así hacemos la investigación. Pero sí, a nivel de cifras, han aumentado bastante las denuncias que se han hecho”, sostuvo.

¿Hay bandas organizadas dedicadas al tráfico animal en Chile?

Pese a los casos que hemos visto, el funcionario policial que no es un fenómeno que hayan observado aún. Sin embargo, sí indicó que en zonas fronterizas, como en el norte, se han detectado casos relacionados al tráfico animal.

“Yo trabajé en Arica y era más común ver, por el paso fronterizo, que pasaban animales de raza entremedio de la maleta; los amarraban o los dopaban. Ahí era más común ver ese tipo de cosas, pero no asociadas a una banda criminal, no podríamos concluir eso aún”, mencionó.

“Hemos hecho investigaciones sobre criadores clandestinos, o venta ilegal de perros de raza, y la mantención de ello cae dentro del delito de maltrato animal, porque los caniles dentro de los cuales los mantienen a veces están en pésimas condiciones. Pero no tenemos investigaciones grandes sobre bandas criminales”, precisó.

Ley Cholito

Fue el 19 de julio de 2017 cuando la entonces presidenta Michelle Bachelet promulgó la llamada “Ley Cholito”, cuerpo legal que regula la tenencia responsable de mascotas y animales de compañía en Chile.

No obstante, además estipula la identificación de los animales, establece sanciones para quienes no cumplan con la normativa e instruye a los municipios qué hacer en casos de abandono.

Dentro de los aspectos que estipula esta ley, encontramos que el dueño del animal está obligado a su adecuada identificación e inscripción, además que será su responsabilidad la alimentación, manejo sanitario y cumplimiento de la norma. También deberá responder civilmente por los daños que pueda causar su mascota. A su vez, la Ley Cholito establece que los municipios tienen la facultad de rescatar a los animales que no cuenten con una correcta identificación.

Al respecto, el comisario explicó que “esta ley, en la profundidad de la ley, nosotros no lo vemos, porque la PDI se preocupa principalmente de delitos, y las infracciones que se causan en la ley de tenencia son faltas”. En ese sentido, señaló que la ley de tenencia responsable está pensada principalmente para que las municipalidades y Carabineros se preocupen de lo que es la tenencia.

“Nosotros no sacamos multas, sino lo que hacemos es llevar a una persona, que cometió un delito, ante un tribunal para ser juzgado posteriormente. Pero lo que es tenencia responsable está sujeto a multas y nosotros no nos encargamos de eso. Obviamente es un tema muy sensible entre tenencia responsable a que pase a maltrato, porque el animal efectivamente puede estar ladrando mucho porque está en malas condiciones de mantención, entonces ahí cambia el contexto”, expresó.

A modo de ejemplo, el policía precisó que si un perro se mantiene en un balcón rodeado de fecas u orinas, es considerado como tenencia irresponsable. “O si se escapa y muerde a otro perro o a una persona, eso también es tenencia irresponsable. Pero nosotros vemos el delito de maltrato que es realizado desde un ser humano a un animal”, expuso.

“Ahora, obviamente que a través de una denuncia de tenencia irresponsable también puede pasar a maltrato animal, porque si va la inspección, la municipalidad o Carabineros y verifica que el perro o gato se encuentra en una condición corporal baja, ya pasa a maltrato”, remarcó.