Dos expertos en desminado, un británico y un australiano, murieron en la explosión de munición de la Segunda Guerra Mundial que estaban tratando de neutralizar en las Islas Salomón, anunciaron este lunes las autoridades

El accidente se produjo el domingo en Honiara, la capital de este archipiélago en el océano Pacífico, y las dos personas fallecieron tras ser trasladadas al hospital, según la policía local.

La organización benéfica Norwegian People’s Aid (NPA), que dispone de una base de datos sobre municiones sin detonar en las Islas Salomón, confirmó que dos de sus trabajadores murieron: el británico Stephen “Luke” Atkinson y el australiano Trent Lee.

La NPA precisó que sus actividades en las Islas Salomón se suspenden temporalmente durante la investigación sobre esta explosión “devastadora”.

El archipiélago fue escenario de intensos combates entre las fuerzas aliadas y japonesas durante la Segunda Guerra Mundial. Cuando terminó el conflicto, en el territorio quedó una gran cantidad de obuses, minas terrestres y otras municiones.

La NPA trabaja con la policía local para desarrollar un programa de recogida a nivel nacional. La organización asegura que este material militar plantea problemas de seguridad y degrada el medio ambiente con productos químicos.

“Las municiones del conflicto siguen matando o hiriendo gravemente a la población local y se usan para prácticas de pesca destructivas”, asegura la NPA.

“Las armas explosivas se encuentran a menudo en las obras de construcción de la ciudad, los arrecifes de coral, las granjas, los bosques y los jardines del extrarradio donde los niños las encuentran y, a veces, juegan con ellas”, agrega.