El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, viajará a Costa Rica los días 1 y 2 de junio para reunirse con el presidente, Carlos Alvarado, y con representantes de México, Santo Domingo y de los países de Centroamérica para tratar asuntos migratorios.

Se trata del primer viaje de Blinken a Latinoamérica y se produce tras la visita “virtual” que hizo a México en febrero.

Según el Departamento de Estado, Blinken se reunirá con Alvarado y con el ministro de Exteriores costarricense, Rodolfo Solano.

Esto, para hablar de la relación bilateral y después participará en un encuentro del Sistema de Integración Centroamericana (SICA).

El objetivo de la reunión del SICA es analizar las causas de raíz que provocan la inmigración y ayudar a los países.

En el marco de esa reunión, Blinken tiene previsto mantener reuniones bilaterales con varios de los asistentes para discutir los esfuerzos conjuntos país por país.

Lucha contra la pandemia y crisis económica

A través de estos encuentros entre los que se incluye la lucha contra la pandemia y la recuperación tras la crisis económica que ha provocado, así como el cambio climático.

El SICA, fundado en 1991, está integrado actualmente por Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Nicaragua, Panamá, Honduras, Belice y la República Dominicana como miembros de pleno derecho, mientras que México, EEUU y otros países tienen la categoría de observadores regionales.

Nicaragua aún no ha confirmado si enviará a un representante de su Gobierno al encuentro, país al que han huido centenares nicaragüenses por la represión del Gobierno de Daniel Ortega tras la ola de protestas que sacudió el país en 2018.

Preguntada por la presencia de Nicaragua, la encargada de Latinoamérica en el Departamento de Estado, Julie Chung, reiteró que Washington está “muy preocupado” por las restricciones a la libertad de prensa.

“Tenemos grandes preocupaciones por las elecciones planeadas para este año y sobre existen las condiciones para tener unas elecciones libres y justas”, dijo Chung a la prensa.

Las elecciones de noviembre serán las primeras que se celebran en Nicaragua tras las protestas de 2018.