El Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Bolivia reclamó este miércoles contra la “injerencia” de un alto funcionario argentino, que prometió al refugiado expresidente Evo Morales que promoverá la participación de sus compatriotas residentes en Argentina en los comicios bolivianos de octubre.

Salvador Romero, presidente del TSE, cursó una nota al encargado de negocios argentino en La Paz, Diego Alonso Garcés, en la que manifiesta “su extrañeza” por los dichos del subsecretario de Obras Públicas de Argentina, Edgardo Depetri.

“El mensaje ha causado extrañeza pues constituye una abierta injerencia de autoridades argentinas en el proceso electoral boliviano, contraria a las normas y buenas prácticas electorales internacionales”, afirmó Romero en la misiva.

Depetri contó en su cuenta de la red Twitter que en un encuentro con Morales en Buenos Aires, se comprometió “a fortalecer la participación de migrantes bolivianos, en la elección presidencial, para que Bolivia vuelva a ser un país libre y democrático”.

Anulados

Unos 166.000 bolivianos residentes en Argentina están habilitados para votar en las elecciones presidenciales y legislativas de Bolivia del 18 de octubre, las cuales reemplazan a los cuestionados comicios de 2019, cuyos resultados polémicos fueron anulados tras causar una convulsión social que condujo a la renuncia del socialista Morales.

En su misiva, Romero “solicita al gobierno de la República Argentina evitar cualquier tipo de acciones, actividades o declaraciones que influyan sobre la orientación del voto de los ciudadanos bolivianos”.

Para estos comicios están empatados en intención de voto Luis Arce, delfín de Morales, y el expresidente de centro Carlos Mesa, ambos con el 23%. Les siguen la mandataria interina de derecha Jeanine Áñez (12%) y el líder cívico conservador de la región de Santa Cruz (este), Luis Fernando Camacho (6%).