Un brote de coronavirus fue detectado este sábado en la cárcel de Palmasola, la más sobrepoblada y violenta de Bolivia, donde se registraron 25 nuevos contagios y un segundo deceso, lo que obligó a aplicar medidas urgentes de aislamiento.

“Un total de 25 personas privadas de libertad han dado positivo al covid-19. Al tener un brote epidemiológico dentro del penal de Palmasola, vamos a establecer dos centros de aislamiento: uno para sospechosos y otro para las personas que han dado positivo”, dijo a la prensa Vladimir Peña, secretario de la Gobernación de Santa Cruz.

También se informó de la muerte de un segundo preso en la cárcel, después que la semana pasada falleciera el primer detenido.

Peña precisó que las brigadas médicas atendieron este sábado a 172 presos el centro penitenciario y 16 fueron hospitalizados.

Las autoridades penitenciarias han dispuesto además un consultorio móvil dentro del penal, así como turnos permanentes de personal médico para hacer frente a la emergencia.

Un centenar de camas serán instaladas en el área deportiva de la cárcel para albergar a los contagiados y sospechosos.

Con capacidad para 1.700 detenidos, el penal de Palmasola alberga a unos 7.000, en su mayoría sin sentencia.

Integrantes de organizaciones criminales brasileñas como el Primer Comando de la Capital cumplen condena en Palmasola y son frecuentemente protagonistas de hechos violentos.

Santa Cruz es el epicentro de la pandemia en Bolivia, con el 64% de los 3.577 casos que registra el país. El último reporte da cuenta de 164 decesos, la mayoría en la región oriental.

“Las cárceles son una bomba de tiempo”, afirmó el viceministro de Seguridad Ciudadana, Wilson Santamaría, tras señalar que se aceleran las gestiones para descongestionar los penales.

Un indulto fue aprobado en abril para presos mayores de 58 años, considerados como la población detenida más vulnerable al covid-19.