Una nueva polémica ha nacido en el mundo de Twitter, esta vez involucrando al magnate Elon Musk; la hija del presidente Donald Trump, Ivanka; y la codirectora de la película de culto Matrix, Lily Wachowski.

El domingo, Musk publicó un tuit donde escribió “toma la píldora roja”, junto a un emoji de rosa. El mensaje explotó y a la fecha tiene más de 600 mil reacciones.

Uno de los usuarios que contestaron fue Ivanka Trump, quien afirmó “¡ya me la tomé!”.

Para muchos podría parecer un intercambio inofensivo, ya que se trata de una referencia al famoso filme de 1999, específicamente a la escena en que Morpheus (Lawrence Fishburne) le ofrece a Neo (Keanu Reeves) dos opciones: puede tomar la píldora azul y regresar a su vida normal, olvidando que vive en una simulación por computadora… o tomar la píldora roja y conocer toda la verdad sobre el mundo de fantasía en el que está preso.

El problema es que en Estados Unidos, esta frase ha tomado un nuevo significado referente a la política: “tomar la píldora roja” se ha asociado a convertirse en seguidor de la derecha, pues el rojo es el color que siempre representa al Partido Republicano (al que pertenece Donald Trump).

En redes sociales, también se ha asociado la cita a Donald Trump, por la misma razón, y a los grupos de extrema derecha que lo siguen.

Por esta razón es que a la codirectora de Matrix, Lily Wachowski, no le agradó para nada que usaran una referencia a su película.

Y respondió en Twitter a Musk y Trump con un simple mensaje: “Váyanse a la mierda los dos”.

Actualmente, está en producción la cuarta entrega de la saga The Matrix, que regresa a casi dos décadas del estreno de la tercera cinta. Sin embargo, a diferencia de las anteriores, esta vez ha sido dirigida y escrita sólo por Lana Wachowski, Lily no está involucrada.

Las grabaciones estaban en curso y tuvieron que ser pausadas debido a la pandemia de coronavirus.

Por otra parte, la última semana ha sido controversial para Elon Musk no sólo por esto: anunció que reanudaría la producción de Tesla aunque no tuviese permiso de las autoridades, mientras los trabajadores denunciaron amenazas.