El príncipe Harry, nieto de Isabel II, anunció una demanda contra el diario británico Mail on Sunday, miembro de una prensa sensacionalista que, según él, trata “sin piedad” a su esposa Meghan Markle tal como ocurrió con su madre, la princesa Diana.

Ese tabloide publicó en febrero una carta personal de Meghan –duquesa de Sussex desde su boda con Harry en mayo de 2018– en que la exactriz estadounidense pedía a su padre, Thomas Markle, que vive en México y con quien mantiene una relación muy distante, que dejara de mentir.

En una cruda y dura carta difundido el martes por la noche, el duque de Sussex afirmó que decidieron tomar acciones judiciales porque la misiva fue “publicada ilegalmente de manera intencionadamente destructiva”.

Harry, de 35 años, asegura que su esposa está siendo acosada por la prensa igual que lo fue su madre, Diana de Gales, que murió en 1997 en un accidente de coche en París cuando era perseguida por un grupo de paparazzi.

“Lo que más miedo me da es que la historia se repita”, dijo el nieto de Isabel II. “Perdí a mi madre y ahora veo a mi mujer siendo víctima de las mismas fuerzas poderosas”, añadió.

Dirigiéndose directamente a los lectores, Harry aseguró que el artículo “les ha engañado a propósito, omitiendo estratégicamente algunos párrafos, algunas frases e incluso algunas palabras para esconder las mentiras que llevan contando desde hace un año”.

“Desgraciadamente, mi mujer se ha convertido en una de las últimas víctimas de la prensa sensacionalista británica que lleva a cabo campañas contra individuos sin pensar en las consecuencias”, afirmó. “Esta propaganda implacable tiene un coste humano”.

Un portavoz del Mail on Sunday aseguró que el periódico defiende y mantiene lo que publicó: “Negamos categóricamente que la carta de la duquesa fuese editada de cualquier manera que cambiara su significado”.

Roy Greenslade, un reputado comentarista de los medios de comunicación, consideró que la pareja puede ganar el juicio “por violación de los derechos de autor”. Pero advirtió que es arriesgado atacar a toda la prensa por las acciones de un medio.

“La prensa, en particular la prensa sensacionalista, es menos poderosa ahora que durante la era de su madre y probablemente menos poderosa de lo que ha sido nunca”, dijo a la radio BBC.

“Duquesa caprichosa”

Harry y Meghan, vistos como una pareja moderna que quiere escapar a las convenciones reales, se encuentran actualmente en el África austral, donde el miércoles debían terminar una gira de diez días acompañados por su hijo Archie, de casi cinco meses.

Tras su boda, la prensa británica había dado una muy buena acogido a Meghan, resaltando su espontaneidad y su sencilla desenvoltura, alabando su defensa de las mujeres y sus acciones caritativas con inmigrantes.

Pero la exactriz, de 38 años, fue después objeto de críticas por su supuesto comportamiento difícil tras una serie de dimisiones en el seno del personal de la casa real, hasta el punto de ser apodada la “duquesa caprichosa”.

Primer miembro mestizo de la familia real británica, Meghan, que tiene entre sus ancestros a esclavos que trabajaban en las plantaciones de algodón de Georgia, fue también objeto de ataques en las redes sociales por sus raíces afroamericanas.

Un presentador de la radio BBC 5 Live, Danny Baker, fue despedido en mayo tras haber publicado un tuit sobre el hijo de la pareja junto a una foto de un mono.

Incluso el actor estadounidense George Clooney, amigo personal de la duquesa de Sussex, aseguró que esta estaba “siendo perseguida y vilipendiada de la misma manera que lo fue Diana”. “La historia se está repitiendo” y “ya vimos como terminó”, dijo Clooney a la revista WHO en febrero.

“No creo que las dos [situaciones] sean comparables”, comentó entonces a la AFP Penny Junor, experta de la familia real británica.

Tras la muerte de Lady Di, la prensa británica revisó su código de conducta, cuyo respeto garantiza un organismo independiente, al reforzar sus normas sobre el acoso y el respeto a la vida privada.

Ello permitió poner fin a los “peores excesos” de hace 25 años, “cuando los paparazzi se tomaban muchas más libertades”, según Junor.

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“Hasta el momento, no hemos sido capaces de remediar las continuas tergiversaciones, algo de lo que estos medios en particular han estado al tanto y, por ende, explotado a diario e incluso hora a hora.

Es por esto que tomaremos acciones legales, un proceso que se ha estado preparando por meses. La cobertura positiva de la semana pasada de las mismas publicaciones revela el doble estándar de esta prensa específica que ha vilipendiado casi a diario por los últimos nueve meses; han sido capaces de crear mentira tras mentira a costa suya simplemente por el hecho que no ha estado visible mientras está con permiso de maternidad. Es la misma mujer que hace un año atrás el día de nuestro matrimonio, tal como es la misma mujer que han visto en este tour de África.

Para este medio esto es un juego, y uno que nosotros no hemos estados dispuestos a jugar desde el comienzo. He sido un testigo silencioso de su sufrimiento en privado por demasiado tiempo. Quedarme atrás y no hacer nada sería contrario a todo lo que creo.

Esta acción legal se debe a un incidente dentro de un largo y perturbador patrón de comportamiento por parte de los tabloides británicos. Los contenidos de una carta privada fueron publicados de una manera ilegal y destructivamente intencionada para manipularlos a ustedes, los lectores, y aumentar la agenda divisiva de este grupo en cuestión. Sumado a la publicación de este documento privado, los engañaron a propósito al, estratégicamente, omitir algunos párrafos, oraciones específicas e incluso palabras sueltas para enmascarar las mentiras que han perpetuado por más de un año.

Llega un punto cuando la única cosa que se puede hacer es enfrentar este comportamiento, porque destruye gente y destruye vidas. En pocas palabras, es bullying, el que asusta y calla a las personas. Todos sabemos que esto no es aceptable, en ningún nivel. No podemos ni creeremos en un mundo donde no haya responsabilidad por esto.

Aunque esta acción puede que no sea la más segura, es la correcta, porque mi miedo más profundo es que la historia se repita. He visto lo que ocurre cuando alguien que amo es mercantilizado al punto que ya no tratados ni vistos como una persona real. Perdí a mi mamá y ahora veo a mi esposa ser víctima de las mismas fuerzas.

Le agradecemos a ustedes, la ciudadanía, por su continuo apoyo. Lo agradecemos tremendamente. Aunque no lo parezca, realmente lo necesitamos”.