Alfredo Allende, de 55 años, juega Kino desde hace muchos años. “Ya ni me acuerdo cuántos, pero es parte de lo que me gusta hacer”. Y durante todo ese tiempo lo ha hecho optando por la combinación al azar. Y eso que sabe de números, porque es contador de profesión, por lo tanto podría estudiar acerca de cuáles son los números que más se repiten o los más “afortunados” para tener mejores posibilidades de ganar. Pero no, siempre ha jugado “a lo que venga”, como dice él.
Sin embargo, toda regla tiene su excepción, dicen. Y es lo que le ocurrió a Alfredo. Cuando jugó su Kino por internet para el sorteo Nº 2307, no sabe qué fue lo que le pasó, pero ese día decidió cambiar su fórmula y eligió los números, no seleccionados previamente, ni tampoco usando fechas especiales o cumpleaños, “pero fui escogiendo de uno. Eran mis números, no los de la máquina, como era lo habitual“. Y jugó.
Lo hizo sin cábalas ni supersticiones, como siempre, sólo pensando en el valor que más busca encontrar: la tranquilidad, para él y para su familia. También lo hizo pensando en su vejez y con el tema siempre presente de las pensiones “que no alcanzan para tener una buena calidad de vida”.
No se había acordado de revisar su Kino hasta que, al tercer o cuarto día, prendió su computador y verificó su juego. Es algo tímido Alfredo, pero al saber que era el ganador del Kino en la categoría Chanchito Regalón, con exactamente $83.367.960, gritó tan fuerte y saltaba, que llegaron corriendo su esposa Mirna y su hija Belén (matrona, de 25 años), con quienes compartió esta alegría.
“No dormí nada esa noche”, relata, agregando que las celebraciones las dejará para más adelante, cuando se pueda juntar con toda la familia. Por estos días, va a celebrar con un asadito con su señora e hija. Y a seguir con el teletrabajo para una empresa donde es contador.
“Este premio es un gran alivio”, dice, “sobre todo para los tiempos que estamos viviendo. Tiempos difíciles, este premio nos da mucha tranquilidad, justamente lo que buscaba cuando jugaba”.
Alfredo Allende confiesa que ha tenido una vida sin grandes sobresaltos, de clase media, de esfuerzo, “con los altos y bajos, como todos, pero tranquila”.
En su época juvenil tuvo la afición del vóleibol y formaba parte del equipo de Colo Colo (equipo de fútbol del cual es hincha). Y antes del estallido social y de la pandemia, salía más seguido con su familia a caminar, a disfrutar de algún parque.
Su tranquilidad cotidiana podrá cambiar en algo, cuando se termine la pandemia, ya que uno de sus “gustitos”, señala, será conocer el sur de nuestro país.
“Con suerte conozco hasta Rancagua y para el norte hasta La Serena. Pero si, quisiera cumplir un sueño, ese sería, conocer el sur de nuestro país, por lo que he visto, es muy bonito. De hecho, me gusta mucho ver en televisión los programas de turismo o algo así donde muestran los paisajes de Chile. El resto del premio se verá en su momento, por lo menos ahora tengo una sensaciòn de tranquilidad y eso es bueno para tener una buena vida”, finaliza en su tono feliz y siempre trasquilo. “Gracias al Chanchito Regalón de Kino”.
Kino se puede jugar por internet o comprando en diversos locales comerciales a lo largo del país. Se sortea domingo, miércoles y viernes.
