Parlamentarios criticaron al Gobierno y a las autoridades medioambientales por el apuro en sindicar a la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP), como la gran responsable de la crisis ambiental en Quintero y Puchuncaví.

Una exposición ante la Comisión de Minería del Senado, realizada por autoridades de ENAP, reavivaron las críticas a la gobernación sobre su manejo de la crisis ecológica en la “zona de sacrificio” de la región de Valparaíso.

El primer comentario vino desde la presidenta de esta instancia, la senadora del Partido Socialista (PS), Isabel Allende, quien dijo que el Gobierno simplemente se apuró más de la cuenta, pues en el lugar existen 20 industrias trabajando.

En esa misma línea, el senador independiente, Carlos Bianchi, afirmó que la verdadera intención de estas administraciones de la cartera es hacer quebrar a la empresa estatal.

En la exposición intervino el actual gerente general de ENAP, Andrés Roccatagliata, quien señaló que al menos el 70% de las casi 1300 intoxicaciones que se han registrado hasta la fecha, se han producido después del 24 de agosto, día en que la empresa cesó las faenas de mantención de dos de sus estanques de hidrocarburos, sindicados en un comienzo como los presuntos causantes de las intoxicaciones.

Por su parte, el presidente del Sindicato de Trabajadores de ENAP, Norberto Díaz, calificó de extraña la tesis del ejecutivo y aseguró que durante décadas esta empresa ha realizado las mismas operaciones que son sindicadas como las causantes de las intoxicaciones, pero sin efecto perjudicial alguno.

Actualmente la Empresa Nacional de Petróleo enfrenta cargos ante la Superintendencia de Medio Ambiente por las intoxicaciones en Quintero y Puchuncaví, y hace días entregó un informe donde establece la hipótesis de que sería la red de alcantarillado público la real causante de las masivas intoxicaciones.