Para inicios de septiembre se espera el inicio de actividades de Scotiabank Azul, la fusión entre los bancos Scotiabank y BBVA.

Debido a la operación, la institución financiera de capitales canadienses contemplaría un plan de optimización que involucrará el cierre de 40 sucursales, aproximadamente.

Las oficinas seleccionadas serán aquellas que se encuentren muy cerca entre sí -por ejemplo, en la misma cuadra-, según advirtieron a La Tercera fuentes conocedoras del proceso de fusión.

A pesar de estos cierres, la sumatoria de ambos bancos lograrán mejor cobertura geográfica que la existente, considerando que existían zonas del país donde no llegaba BBVA o Scotibank, según el caso.

La nueva red, según el citado medio, ganará presencia en unos 30 puntos de la región metropolitana y otros 30 en regiones.

Este cierre de sucursales no afectará tampoco la fuerza comercial, debido a que los ejecutivos de cuentas mantendrían sus carteras o la trasladarían a la sucursal más cercana.

Scotiabank, según cifras a mayo de la Superintendencia de Bancos, tiene 88 sucursales, 41 de ellas en la capital; BBVA tiene 124, concentrando 68 de ellas en la región Metropolitana.

Tribeca Advisors, evaluador independiente de Scotiabank, proyectó una pérdida inicial de clientes de 5,2% del total de ambos bancos.