¿Quiénes invierten hoy en departamentos? Es la pregunta que responde el estudio “Inversión Inmobiliaria en Pandemia: Perfilamiento del inversionista”, desarrollado por Capitalizarme.com y BDO Chile, que muestra los cambios que se han generado en este negocio, a partir de la llegada del coronavirus al país y al mundo.

Según el testeo, que se realizó en base a una muestra de alrededor de 1.250 promesas de compraventa desarrolladas y teniendo como intermediario a la empresa Capitalizarme.com, el perfil del inversionista hoy es el de una persona más joven que antes de la pandemia, lo que a juicio de los expertos podría revelar que los inversionistas aversos al riesgo o con obligaciones adicionales han bajado el nivel de compra.

Otro fenómeno que se ha generado y que destaca el estudio, es cómo hoy se atreven a invertir personas que tienen, en promedio, menos ingresos de lo que estábamos acostumbrados a ver.

Es así como antes del Covid-19, el ingreso promedio de los inversionistas estaba en el rango promedio de “entre $1.500.000 – $2.499.999” y tras el inicio del confinamiento, este bajó a un rango de “entre $1.000.000 – $1.499.999”.

“Una situación que podría explicarse principalmente dado que los inversionistas en época de pandemia presentan un promedio de edad inferior. En este sentido, personas más jóvenes podrían tener menos compromisos familiares, por lo que pueden invertir, a pesar de tener un ingreso menor al del perfil pre-pandemia”, explica Francisco Ackermann, gerente comercial y co-founder de Capitalizarme.com.

También, según la encuesta, es posible identificar una mayor participación de hombres tomando posición en la inversión de propiedades en época de pandemia (72,5%). Proceso que podría estar relacionado a que históricamente las mujeres se identifican con un grupo de mayor compromiso familiar, y por tanto, con menor exposición al riesgo.

En este sentido Nicolás Herrera, socio de la división de real estate de BDO comenta que “los datos muestran que los hombres concentran la inversión en propiedades en época de pandemia, lo que podría relacionarse con el perfil social en Chile, donde las mujeres constituyen el grueso de los hogares monoparentales con altos compromisos económicos y sin opciones de ahorro”.

Otro dato relevante, demuestra que el inversionista en época de pandemia privilegia comprar en comunas con alta demanda, en este sentido, los datos revelan una mayor predilección por departamentos ubicados en la comuna de Santiago.

En tanto, durante el periodo pre–pandemia, los inversionistas invertían de manera algo más homogeniza, distribuyendo el capital en comunas como San Miguel, Santiago, Estación Central y Quinta Normal.

Sobre la residencia de origen, el estudio manifiesta que, tanto en pre–pandemia como en post–pandemia, los inversionistas presentan residencia en el sector oriente del Gran Santiago, destacando las comunas de Las Condes y Vitacura, seguido de Santiago y Ñuñoa.

En qué trabajan quienes compran

Un dato relevante es la profesión de quienes compran.

Es así como las ingenierías concentran la inversión tanto en época de pre y post pandemia, esto podría estar relacionado con que es un área que presenta una alta tasa de empleabilidad e ingresos muy por sobre la media.

Sin embargo, en el cuadro post-pandemia, destacan también los profesionales de la salud (12,6%), los técnicos (9,9%) y profesores (4,1%).