El destacado astrónomo nacional José Maza es una voz más que autorizada al momento de hablar sobre el espacio y la Tierra.

Académico del Departamento de Astronomía de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile desde hace 50 años, Premio Nacional de Ciencias Exactas 1999 y autor de los libros como “Marte la Próxima Frontera de Editorial Planeta”, Maza se ha posicionado como el científico chileno vivo más mediático.

Esto lo ha llevado a participar en diversos programas de radio y televisión. Actualmente, asiste casi semana por medio a Mentiras Verdaderas de La Red, mismo espacio televisivo al que han invitado a Sixto Paz, conferencista peruano que asegura haber sido abducido hacia Ganimedes, el satélite natural más grande de Júpiter.

“Que en ese programa hayan tenido cosas esotéricas y que de alguna manera, en alguna medida, lo han reemplazado por llevarme a mí, a mí me da un doble orgullo”, señaló el astrofísico en entrevista con la sección Culto de La Tercera.

“Sixto Paz, te digo con nombre y apellido. Dice que él es abducido a Ganimedes. En Ganimedes hay -150°. ¡Si al gallo lo llevaran a Ganimedes tendría que volver azul de la temperatura que hay!”, agregó Maza.

Pero eso no es todo, ya que el astrónomo chileno apuntó además hacia quienes creen en el horóscopo.

“¡El horóscopo es otra estupidez como la Tierra plana! Imagínate, yo soy Capricornio y bueno, ¡hay un millón y medio de Capricornio!”, enfatizó.

José Maza con su libro Somos polvo de estrellas (CC) Wikimedia Commons
José Maza con su libro Somos polvo de estrellas (CC) Wikimedia Commons

“Yo soy lo que soy porque mi madre y mi padre tenían toda una estructura y en mi casa me criaron de cierta manera, no porque yo haya nacido en enero”, añadió Maza.

Esta visión sobre el horóscopo la complementó con una comparación. “Mira, yo nací en el mismo día que ‘Bam Bam’ Zamorano -él es 19 años más joven que yo- y la verdad es que por donde lo miro no veo ninguna semejanza”, sostuvo.

“Yo nunca le pude pegar a la pelota, ni con los pies al tercer bote le pegaba y con la cabeza no le pegué nunca a la pelota”, confesó entre risas.