A poco más de 10 meses de su anuncio oficial, la versión chilena del festival Rock in Rio ratificó su postergación a raíz de la pandemia del covid-19.

“El festival va, pero por el estallido social y la pandemia, lamentablemente no lo vamos a realizar en 2021”, señaló al diario La Tercera Felipe Araya, vocero de la productora Rock Santiago (a cargo del evento).

Si bien la edición 2021 ya fue descartada de plano, desde la firma ven viable que esta sí pueda realizarse en 2022 o incluso 2023.

La cita había sido anunciada en octubre pasado con miras al año 2021. Esto, con los esfuerzos asociados de la Intendencia Metropolitana (en esa época con Karla Rubilar a la cabeza), la Subsecretaría de Turismo (liderada por Mónica Zalaquett, actual ministra del Mujer y la Equidad de Género) y Rock Santiago.

La iniciativa también fue impulsada por el flamante fundador de Rock in Rio, Roberto Medina, quien según el matutino habría determinado suspender el arribo a Chile tras los sucesos del 18 de octubre.

“El festival no se ha bajado. Seguimos hablando con Roberto (Medina) y con su equipo directivo. Con el CEO de Rock in Rio, Luis Justo (CEO), hablamos todas las semanas prácticamente, y seguimos trabajando a full para que llegue Rock in Rio y sea el gran megaevento que Chile espera”, agregó el productor.

La postergación se conoce a días de la suspensión de otro festival de gran escaña en el país: Lollapalooza Chile, el cual aplazó su próxima edición para 2021.

Según el matutino, una fecha que ilusiona a las partes involucradas es 2023; todo esto a raíz de los Juegos Panamericanos que se realizarán en Santiago ese año.