“Su extraordinaria capacidad para producir significados manifiesta que no hay nada uniforme en usar uniforme", señalaron las curadoras de “Jumper. 50 años de historias".
El jumper escolar, emblema de la presencia femenina en la educación chilena, es el protagonista de la exhibición “Jumper. 50 años de historias”, disponible este mes en la sala de artes visuales del Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM).
Curada por Pía Montalva (Thinking Fashion) y Colectivo Malvestidas (Loreto Martínez y Tamara Poblete), la muestra tiene tres ejes curatoriales: uno histórico, otro enfocado en movimientos estudiantiles, y un último sobre su uso simbólico en el arte contemporáneo.
“En la exposición se pueden ver los orígenes del jumper y su instalación como uniforme oficial, para vincularlo a las condiciones políticas, sociales, económicas y culturales que avalan su alta visibilidad en un periodo y su casi extinción en la actualidad”, se lee en un comunicado sobre “Jumper. 50 años de historias”.
“Se invitará al visitante a descubrir la trayectoria desde su creación en 1968 e implementación como uniforme escolar obligatorio a partir del año 1969 hasta el presente. Su instauración obedece a la necesidad de homologar la apariencia de las estudiantes, en función de un proyecto nacional que esperaba conciliar modernización y equidad. Y culmina a fines de 2019, momento en que sus portadoras asumen un importante protagonismo tanto en las acciones disidentes, como en las distintas demandas puestas en escena en el marco de las protestas”, agregan.
En este ítem, la muestra releva el su uso político del jumper escolar en diversos contextos de movimientos sociales, principalmente relacionados con educación. “La exposición marca la presencia del jumper movilizado-intervenido-escrito en marchas y performances callejeras que reclaman contra la desigualdad, la violencia de género y el respeto a la diversidad sexual”, describen desde el GAM.
Mediante fotografías, material de archivo, registros audiovisuales, avisos publicitarios relativos a su comercialización, panfletos, ilustraciones y recopilación gráfica, la exposición pretende reflejar la “naturaleza compleja de esta indumentaria, siendo esta prenda de vestir la que quizás ha tenido un mayor impacto que cualquier otra en nuestra sociedad”.
“Su extraordinaria capacidad para producir significados manifiesta que no hay nada uniforme en usar uniforme. La muestra explora las diferentes estructuras de la prenda, con el objeto de significar lógicas de clase, roles de género y disciplinamiento del cuerpo. Por ejemplo, la masiva presencia del jumper en desfiles patrios y brigadas de tránsito, durante la dictadura militar”, comentan las curadoras.
En la muestra, el uso simbólico del jumper en el arte contemporáneo queda en evidencia en distintas obras de artistas visuales chilenas, como Ximena Zomosa, Constanza Urrutia, Katherina Oñate y Nury González, quienes exponen trabajos que abordan las temáticas del jumper, los uniformes, los textiles y la indumentaria como memoria.
También se presentará una pared completa con fotografías del público, recogidas en una convocatoria abierta desde 2019 que buscó recopilar imágenes de chilenas usando jumper en distintas épocas.
Hasta el 31 Julio
Martes a Domingo – 10:00 a 22:00 horas
Gratis
Curaduría: Colectivo Malvestidas (Loreto Martínez y Tamara Poblete) y Pía Montalva
Ficha Museográfica: Ximena Zomosa, Constanza Urrutia, Katherina Oñate, Nury González | FONDART -Convocatoria 2019.
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