La novela de Rodrigo Ramos Bañados (Antofagasta, 1973) se centra en Jean, un joven colombiano que llega con su familia a Chile, a Antofalombia, en busca de un mejor futuro. O al menos uno donde la violencia y la muerte no esté siempre ahí, al acecho.

Y llegan a barrios marginales, donde la “ley”, en algunos aspectos.,no es tan distinta a la de allá:

“Reinaba la solidaridad tipo graffiti de los tres monos: nadie mira, nadie escucha, nadie habla.” (pp 52)

Jean quiere dejar atrás su país, se encanta con el desierto y el mar. Su padre, de un pasado oscuro del que se dice poco o del que no quieren hablar, busca formas para sacar ventaja. La madre es la que comienza a sostener económicamente a la familia.Todo ello entre la solidaridad de la Iglesia Católica, el recelo de los vecinos y el rechazo que sienten en muchas partes. Y el aprovechamiento sensacionalista de la prensa.

En ese ambiente, es difícil no sucumbir a la rabia.

“Esos chilenos, castigados socialmente con la musical y eruptiva palabra flaite, tenían al fin alguien a quien traspasarle la mierda depositada por sus compatriotas sobre sus cabezas.” (pp 53)

“Lo que más le molestaba era el desprecio de los chilenos, sus susurros fáciles de descifrar: un colombiano menos.” (pp 77)

Ciudad berraca es una novela que muestra, desde la perspectiva de colombianos pobres, marginados, Antofagasta, esa ciudad siempre multirracial y multicultural que, hoy, se muestra racista, clasista. Y el relato no elude temas como problemas generados por los inmigrantes, como otros propios del país y de la ciudad.

Entretenido, Ciudad berraca peca, sin embargo, de haber perdido la oportunidad de entregar perfiles más definidos, más profundos, de entrar con mayor densidad en temas que son candentes y preocupantes en Antofagasta como en casi todo el país (y buena parte del mundo).

Ciudad berraca, Alfaguara (c)
Ciudad berraca, Alfaguara (c)

Ciudad berraca
Rodrigo Ramos Bañados
Alfaguara

Penguin Ramdon House Grupo Editorial
Santiago de Chile, junio de 2018