La estrella pop, David Bowie también brilló en la pantalla en una treintena de roles entre los cuales el más importante fue tal vez Furyo de Nagisa Oshima, pero fue “un extraterrestre en el universo del cine”, según los críticos.
David Bowie actuó mucho para el cine y aparece en una treintena de películas, aunque Furyo “fue una de las pocas en las que tuvo un papel de protagonista”.
Allí “se le exigió un trabajo de actor, es decir actuar y no simplemente estar presente”, estimó Jean-Michel Frodon, crítico e historiador del cine.
En cada filme, agrega, “fue ante todo una presencia, una aparición, ser David Bowie más que el personaje que se supone debía interpretar, incluyendo cuando hace el papel de Andy Warhol en ‘Basquiat’ (1996) de Julian Schnabel, lo cual era una buena idea, pero no fue un trabajo de actor, es Bowie, su leyenda y su imagen”.
La carismática estrella pop también actuó en Twin Peaks: Fire Walk With Me (Los últimos días de Laura Palmer, 1992) de David Lynch, en La última tentación de Cristo (1988) de Martin Scorsese, y en The Prestige (El Gran Truco, 2006) de Christopher Nolan.
En The Hungers (El Ansia, 1983) de Tony Scott, protagoniza junto a Catherine Deneuve, “un filme de terror que me parece muy olvidable”, admitió.
Tras el musical Absolute Beginners (1986), “El hombre que vino de las estrellas” le ofrece un papel a medida, Bowie, comenta Frodon, es un extraterrestre que cruza el planeta del cine”.
Según el crítico británico Jonathan Romney, “Bowie elevó este filme ya de por si extraordinario, a un nivel superior gracias a su presencia extraterrestre”.
Pero Bowie “fracasó en su cita con el cine, cuando en realidad tenía la capacidad de hacer mucho más”, opina por su parte el crítico de cine Philippe Rouyer.
Al constatar a fines de los años 80 que su nombre en la cartelera no era suficiente para atraer a los jóvenes a las salas de cine y tras el fracaso de Laberinto (1986) de Jim Henson, “prefirió dedicarse por completo al mundo de la música, mucho más personal”, explica el crítico.