El miércoles 30 de diciembre el Ballet de Santiago despedirá a su gran Primera Bailarina Lidia Olmos, quien pertenece a su plantel desde 1985 y siempre ha sido una de sus grandes figuras.
Lidia Olmos ha estado bailando en este fin de temporada, como una de las principales protagonistas en la versión 2016 del Ballet “Cascanueces”, junto a las estrellas del Ballet de Santiago, el Ballet de Cámara y la Orquesta Filarmónica de Santiago, que están dando vida a este cuento navideño, en una gran producción de Pablo Núñez, en el Teatro Municipal de Santiago.
El famoso clásico con música de Piotr I. Tchaikovsky, en la coreografía de Jaime Pinto, se ofrece en funciones diarias y nos muestra un árbol de Navidad gigante que decora la casa de Clara y Fritz en Nochebuena. El tío Drosselmeyer llega con un precioso Cascanueces de regalo que cobra vida y transforma la celebración en un mágico recorrido por mundos desconocidos. Esta historia, relatada a través de la coreografía de Jaime Pinto con la clásica música de Piotr I. Tchaikovsky, ha sido acogida por numerosos espectadores, entre ellos muchos niños pequeños y adultos mayores, que se deeleitan con su desarrollo agradable para la vista y el oído.
Luis Ortigoza, Rodrigo Guzmán, Maite Ramírez, Lidia Olmos, Lucas Alarcón, Natalia Berríos y José Manuel Ghiso, entre otros bailarines del Cuerpo de Baile del Ballet de Santiago se han lucido con este clásico “Cascanueces”, para despedirse de la Temporada 2015 de ballet, marcada por la excelencia que los caracteriza en obras llenas de emociones y destreza. Además, culminan este año con un espectáculo familiar que ha vuelto a pedido del público.
También han danzado figuras jóvenes, incorporadas a un merecido primer plano: Romina Contreras, Camila Aranda, María Lovero, Gabrel Bucher, Emmanuel Vásquez, Ethana Escalona y Katherine Rodríguez.
Marcia Haydée, directora artística del Ballet de Santiago, disfruta cada vez que presentan este ballet junto a la Compañía y habla al respecto: “La Navidad es una época de encuentro y de renacimiento y ése es precisamente el espíritu que trae el Ballet de Santiago para las presentaciones de este clásico. La hermosa música de Piotr I. Tchaikovsky, la genial coreografía de Jaime Pinto que cuenta con una escenografía y vestuario de ensueño, creados por Pablo Núñez, junto a la maestría de los artistas de la Compañía, nos llevarán al mágico mundo de Clarita y Fritz, quienes se embarcarán en una hermosa aventura junto al mago Drosselmeyer y Cascanueces”.
