Apenas cumplen la mayoría de edad, muchas jóvenes deciden abandonar a su familia para convertirse en la nueva estrella de pornografía amateur. Sus rostros aún adolescentes y notoria inexperiencia en el rubro, son las características más apetecibles por la industria que, después de unos meses, son reemplazadas por una total disposición a someterse a cualquier situación por ganar dinero y fama.

Hot Girls Wanted, se llama el documental de 84 minutos dirigido por las artistas Jill Bauer y Ronna Gradus, que evidencia la gran insistencia de mujeres entre 18 y 19 años por entrar a la industria del porno. La película relata la historia de varias jóvenes que se marchan de sus casas, para construir su nueva realidad en Hussie Models, la agencia de talento que busca nuevos rostros para la pornografía.

Cada día una chica nueva

Según adelanta el tráiler, Riley Reynolds, dueño de la agencia, publica un aviso en internet para encontrar “chicas lindas” que calcen en las exigencias fìsicas de una pornstar.

En el anuncio detalla que necesita fotografías de las jóvenes para asegurarse de sus atributos y luego les paga un vuelo a Miami para ampararlas en una enorme casa, en donde la interesada vivirá los meses que dure su carrera.

Riley no sólo se encarga de entregar un techo a las chicas, además gestiona su trabajo y ellas le pagan 10% de sus ingresos, además del arriendo y gastos comunes. “Yo era como el típico loser de instituto al que hacían bullying y ahora soy un triunfador”, cuenta en el largometraje.

Luego de seis meses trabajando -cómo máximo-, 20 millones de pesos (chilenos) y decenas de apariciones en películas y sitios de pornografía, las chicas suelen empezar una nueva vida con el dinero y fama adquiridos.

Pese a lo anterior, sólo durante las primeras semanas las marcas de porno las solicitarán para realizar un trabajo ‘convencional’: si las jóvenes quieren mantener su empleo, estarán forzadas a someterse a otras categorías del oficio como sadomasoquismo, bondage y encuentros sexuales similares a una violación, “porque cada día una chica cumple 18 años y cada día llegan chicas nuevas perfectas para ocupar tu lugar”, cuenta Reynolds.

Hot Girls Wanted

Hot Girls Wanted

Uno de los personajes más llamativos de la cinta es Ava Taylor. Según contó el diario español El País, una joven que decide no ir a la universidad y se burla del ‘trabajo duro’. Sin embargo, después de algunos meses confesará que “sólo se siente como un simple y desechable pedazo de carne”.

Otra de las protagonistas es Stella May, una joven porrista que abandona a su familia de clase media para entrar al porno. Ni la madre ni el novio de la chica están de acuerdo con su decisión y hacen lo posible por desvincularla de su trabajo como prostituta virtual.

“Seguimos en contacto con todas las chicas de la película y con Riley también. Muchas de las chicas ahora aseguran que si hubieran sido un par de años más mayores, probablemente no tomarían la misma decisión, lo que indica cómo las sensibilidades pueden cambiar entre los 18 y los 20 años”, cuenta la directora de la cinta.

“Estas chicas pertenecen a la Generación XXX. Nunca han conocido una vida sin internet y se han visto influenciadas y expuestas al contenido sexual hardcore que existe en línea desde que son pequeñas”, añade Ronna Gradus.

Cabe señalar que el documental se estrenó en enero de este año, en marco del Festival de Cine Sundance 2015 y está disponible para verlo a través Netflix.

https://youtu.be/o2dQojRHX9Q