El poderoso y fugado narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán evitó ser recapturado en días recientes en operativos desplegados en el noroeste de México pero durante su “huída precipitada” resultó herido, informó el viernes el gabinete de Seguridad.

“Para evitar su aprehensión, en días recientes el prófugo realizó una huida precipitada, que de acuerdo con la información recabada, le causó lesiones en una pierna y en el rostro”, indicó el gobierno en un comunicado.

El gobierno aclaró que las heridas del capo, fugado de una cárcel de máxima seguridad en julio pasado, “no fueron producto de un enfrentamiento directo” y que el “Gabinete de Seguridad continúa realizando todas las acciones que permitan lograr la reaprehensión de este delincuente”.

Los operativos para su recaptura se han implementado con “trabajo de inteligencia e intercambio de información con agencias internacionales”, que en “las últimas semanas se han focalizado en la región noroeste del territorio nacional”, donde sufrió las heridas, cuya gravedad no se especificaron en el comunicado.

En esa región se encuentra el estado de Sinaloa, bastión del cártel que lleva el mismo nombre y que encabeza el capo fugado el 11 de julio del penal de máxima seguridad El Altiplano por un túnel cavado en el piso de la ducha de su celda y que tenía salida a una bodega situada a 1,5 km de la cárcel, el cual recorrió en minutos en una motocicleta adaptada para rieles.

Fuentes de la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA) dijeron a la AFP que el capo huyó después de su fuga a una zona montañosa de su natal Sinaloa.

En esa región, “El Chapo”, de 58 años, disfruta del apoyo de la población local, añadieron las fuentes de la DEA.

Un rancho era su escondite

Los colindantes estados de Sinaloa, Durango y Chihuahua son conocidos como el ‘Triángulo Dorado’ por su alta producción de marihuana y amapola.

El anuncio del gobierno sobre las heridas del narcotraficante se producen después de que la cadena estadounidense NBC News aseguró que interceptaciones telefónicas llevaron desde la semana pasada a las Fuerzas Armadas a un rancho de la comunidad de Cosala, situado en una zona serrana de Sinaloa, donde supuestamente se encontraba el “Chapo”.

Los marinos mexicanos arribaron al lugar la semana pasada en helicópteros pero fueron repelidos por los pistoleros del capo, que se fugó en automóvil del sitio.

Al cesar el fuego, los marinos ingresaron al rancho y encontraron celulares, medicamentos y radios de comunicación.

Las Fuerzas Armadas habían calculado que tenían rodeado al capo en un diámetro de 3 kilómetros, según la cadena estadounidense.

La cadena entrevistó a funcionarios que, tras el fallido operativo, dijeron haber “perdido la esperanza” de que el capo sea reacapturado.

Persisten críticas por video filtrado

El miércoles se filtró a Televisa un video inédito con audio de la celda de “El Chapo” grabado minutos antes de su espectacular fuga, en el que se escuchan varios golpes parecidos a martillazos.

De acuerdo al video, más de treinta minutos después de que el capo desapareciera, un custodio se acercó a la celda vacía y preguntó: “¿Guzmán?”.

Ese material audiovisual provocó serias críticas al gobierno por parte de políticos que acusaron a la fiscalía de haber ocultado información a los mexicanos. Argumentan que el video evidencia la tardía reacción de las autoridades del penal ante la espectacular fuga del narcotraficante.

En respuesta, la fiscalía inició una investigación por la filtración del video y dijo que no lo había difundido porque “forma parte de las evidencias para sustentar la acción penal ejercida en contra de varios servidores públicos involucrados en este caso”.

La fuga, consumada la noche del 11 de julio, fue un duro golpe para el gobierno de Enrique Peña Nieto, que ha detenido al director del penal, a la jefa de los servicios penitenciarios federales y a otros 12 funcionarios por presuntamente haber ayudado al capo a fugarse.

En septiembre, México emitió una orden de detención con fines de extradición a Estados Unidos contra el capo, por cuya captura ofrece 3,8 millones de dólares.