El presidente de Isapre Masvida, Claudio Santander, sentenció que los cambios propuestos en la denominada nueva ley de Isapres debe ser gradual y comenzando por mejorar la calidad del sistema público.

En medio del proceso de diálogo entre el Ministerio de Salud, la Superintendencia del ramo y la Asociación de Isapres, el presidente de Isapre Masvida, Claudio Santander valoró un diálogo en el que espera también participar.

Entre los acuerdos, destaca el directivo la necesidad de avanzar hacia un concepto de responsabilidad y compromiso social, pero lamenta la posibilidad de ingreso sin la “declaración de salud”, lo que sería dice Santander, una buena idea si existiera homogeneidad entre los sistemas público y privado, y las personas pudieran elegir libremente con cuál quedarse o atenderse.

Claudio Santander recuerda que los 3 millones 400 mil pesos que pertenecen a las isapres “no le cuestan ni un centavo al Gobierno”, por lo que debiera pensarse mejor la gradualidad de los cambios, aún más en contextos económicos complicados.

De ahí que el fondo de compensación mancomunado que se dispone en la discusión de la nueva Ley de Isapres, está, a juicio del presidente de MasVida, equivocando el foco. Lo lógico para el empresario penquista, era comenzar con el sector público.

En esta fase, al sistema privado deben regularse cuestiones asociadas a los intereses de la gente, eliminar las preexistencias y la modificación del fondo de compensación de isapres por edad y sexo.

“El sexo fuerte es la mujer” – sentenció Claudio Santander, porque las curvas de gasto en salud en mujeres mayores de 60 años es ínfimo respecto al del hombre.